A.Saudí llama a su embajador en Líbano y expulsa diplomático libanés de Riad
Riad/Beirut, 29 oct (EFE).- Arabia Saudí llamó hoy a consultas a su embajador en el Líbano y ordenó la expulsión en un plazo de 48 horas del representante diplomático libanés en Riad en una crisis provocada por la confiscación de drogas en el reino procedentes del país mediterráneo y al que culpó al grupo chií libanés Hizbulá.
'El Gobierno del reino llama al embajador en el Líbano para consultas y ordena la salida del embajador libanés del reino en las próximas 48 horas, y decide detener todas las importaciones libanesas al reino', indicó en un extenso comunicado el Ministerio de Asuntos Exteriores saudí.
El Gobierno saudí expresó su malestar 'por el nivel al que llegaron las relaciones' bilaterales con el Líbano porque 'las autoridades libanesas ignoraron los hechos y dejaron de tomar de medidas para garantizarlas'.
Entre los motivos ofrecidos por estas decisiones señaló 'el control terrorista de Hizbulá en el Líbano', lo que le convirtió en 'un escenario y una plataforma para implementar proyectos de países que no desean lo mejor' para este país y su pueblo.
El ministerio aseveró que las autoridades libanesas no tomaron 'las medidas exigidas' por Riad 'para detener la exportación de drogas' desde el Líbano', especialmente por 'el control terrorista de Hizbulá de todos los puertos', en referencia a que confiscan continuamente drogas, especialmente pastillas de captagon, un estimulante sintético que mezcla anfetamina y cafeína.
Por último, indicó que las declaraciones del ministro de Información libanés 'representan un nuevo episodio de posturas reprobables y rechazadas emitidas por responsables libaneses' hacia Arabia Saudí 'y sus políticas'.
La tensión se disparó a principios de esta semana con la difusión de una entrevista en la que el nuevo ministro de Información libanés, George Kordahi, hizo una serie de comentarios sobre el conflicto armado en el Yemen que fueron interpretados como una defensa a los rebeldes chiíes hutíes.
Kordahi defendió el pasado martes en su cuenta de Twitter que sus las declaraciones, parte de una entrevista con el canal catarí Al Yazira, pretendían resaltar la necesidad de acabar con la 'absurda guerra' en territorio yemení, donde Arabia Saudí y Emiratos lideran una coalición de lucha contra los hutíes.
Por su parte, el presidente libanés, Michel Aoun, se desvinculó de los comentarios y aseguró que no representan la visión del Líbano, cuyo nuevo Gobierno ha anunciado su intención de estrechar los lazos con sus vecinos árabes para salir de la actual crisis económica en la que se encuentra.
Asimismo, las relaciones entre el Beirut y Riad se ha ido tensando desde que en 2018, cuando el entonces primer ministro, Saad Hariri, dimitió de forma repentina y sorpresiva desde Arabia Saudí, país que fue acusado de forzarle a dar ese paso y de mantenerle retenido allí contra su voluntad. EFE
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