Australia y N.Zelanda relajan medidas frente al COVID-19 tras éxito en lucha
Sídney (Australia), 28 abr (EFE).- Australia y Nueva Zelanda, países vecinos pero que aplicaron distintas estrategias para combatir la pandemia de COVID-19, comienzan este martes a relajar sus medidas de restricción social tras el éxito en la lucha contra los contagios locales.
La reapertura de algunas playas en Australia y el reinicio de algunas actividades laborales en Nueva Zealanda son pasos que desde hoy han tomado estas naciones oceánicas después de lograr reducir notablemente el número de contagios.
NUEVA ZELANDA NO BAJA LA GUARDIA
Nueva Zelanda, cuyo gobierno declara haberle ganado la batalla al coronavirus, permite desde hoy la reanudación controlada de un 75 por ciento actividades económicas y comerciales.
Unos 400,000 trabajadores retornaron a sus centros de trabajo y llenaron los puestos de venta de comida rápida por primera vez desde que el 26 de marzo el gobierno neozelandés impusiera el nivel máximo de alerta, considerado como uno de los más estrictos confinamientos del mundo.
El miércoles, además, las escuelas reabrirán sus puertas para los escolares que no pueden realizar sus estudios a distancia, aunque todavía siguen vigentes las restricciones a las actividades sociales y las medidas de distanciamiento físico.
Nueva Zelanda -con actualmente 1.124 casos confirmados de COVID-19, incluidos 19 fallecidos- se propone a erradicar completamente el virus en este país de unos 5 millones de habitantes.
La primera ministra, Jacinda Ardern, remarcó que, pese a las nuevas medidas, 'en ningún momento' se ha puesto punto final a la lucha contra el coronavirus, al tiempo que pidió a sus ciudadanos no bajar la guardia.
'Tenemos que seguir erradicando al COVID-19 hasta que haya una vacuna', precisó la mandataria.
AUSTRALIA APLANA LA CURVA CON UNA ESTRATEGIA DISTINTA
Al otro lado del Mar de Tasman, el gobierno de Australia aplicó progresivamente desde finales de marzo medidas más moderadas en comparación a Nueva Zelanda, y permitió por ejemplo el funcionamiento de las escuelas y las guarderías.
A pesar de las diferencias, Australia, con más de 24 millones de habitantes, también ha logrado aplanar la curva casi al mismo tiempo y actualmente registra 6.727 infectados, incluidos 85 decesos.
'No solamente estamos aplanando la curva, también la estamos consolidando, extendiéndola y asegurándola', dijo hoy el ministro australiano de Salud, Greg Hunt.
APLICACIÓN DE RASTREO Y RELAJACIÓN DE MEDIDAS
El gobierno australiano del primer ministro, Scott Morrison, lanzó este domingo una aplicación para rastrear los casos de COVID-19, que combinado con el reforzamiento del régimen de pruebas para detectar el coronavirus, esperan acelere el proceso de desconfinamiento.
Por el momento, muchos negocios están cerrados o sus actividades restringidas, tampoco se permiten las reuniones de más de dos personas, con excepciones, así como se recomienda a los pobladores a permanecer en casa a menos que se haga deporte, se acuda a una cita médica o se haga la compra.
Si bien el Gobierno central, apoyado en las recomendaciones del equipo médico gubernamental, dicta las principales medidas de distanciamiento y restricción social, los estados y territorios, así como las jurisdicciones locales tienen algunas prerrogativas respecto a la aplicación de las mismas.
En el caso de Nueva Gales del Sur, cuya capital es Sídney, el gobierno estatal anunció que a partir del viernes se permite que dos personas adultas, acompañados por un número indeterminado de niños, visiten una vivienda que no es la suya.
Mientras que el estado de Australia Occidental permite desde ayer las reuniones de diez personas o en Queensland se autorizan desde el próximo fin de semana los pícnics familiares.
Asimismo, la famosa playa de Bondi, en el este de Sídney, y otras dos aledañas reabrieron este martes exclusivamente para la práctica de deportes acuáticos.
Tanto Nueva Zelanda como Australia barajan la posibilidad de reanudar los vuelos entre ambos países. EFE
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