El diálogo sobre la polémica presa del Nilo prosigue con espíritu 'fraternal'
Johannesburgo, 28 oct (EFE).- Las conversaciones entre Etiopía, Sudán y Egipto sobre la polémica presa que Adís Abeba construye en el Nilo Azul se retomaron este martes con espíritu 'constructivo' y 'fraternal' y seguirán la próxima semana, informó hoy la presidencia de turno de la Unión Africana (UA), mediadora en el conflicto.
Pese a las graves diferencias que empañan el proyecto de la Gran Presa del Renacimiento Etíope (GERD), el Gobierno de Sudáfrica, en calidad de líder rotativo de la UA, detalló hoy a través de un comunicado que en la reunión de trabajo realizada ayer de forma virtual todos los actores implicados mantuvieron un tono 'positivo'.
'Las partes de la negociación de la GERD reafirmaron su sincero compromiso con el proceso (de diálogo) liderado por la UA y acordaron, inmediata e incondicionalmente, retomar las negociaciones', afirmó el Ejecutivo sudafricano, a través de un comunicado del Ministerio de Exteriores.
Se comprometieron a desarrollar un plan de trabajo 'claro con marcos temporales y de metas', según la nota, que también señala que las partes acordaron continuar las negociaciones sobre los temas técnicos y legales que quedan.
'Respecto a esto, las partes volverán a informar en una reunión ministerial de continuación en siete días', agregó el comunicado.
La reunión de este martes -auspiciada por la UA y con presencia de observadores de la Unión Europea y de Estados Unidos- suponía la reanudación de las complejas negociaciones sobre la presa etíope en el Nilo Azul siete semanas después de la última interrupción del diálogo tripartito.
Egipto, Etiopía y Sudán llevan implicados desde hace años en un complicado proceso de negociación por el llenado de la presa, pero el proyecto mantiene enfrentados especialmente a los dos primeros países debido al potencial impacto de la gigantesca infraestructura etíope en el caudal del Nilo.
El proyecto se inició en 2011 y Egipto lo considera una 'amenaza' a su seguridad nacional, ya que depende del Nilo para aproximadamente el 97 % de su riego y agua potable.
Etiopía, por su parte, considera la presa estratégica para su desarrollo, tanto en términos de irrigación para su agricultura como en cuanto a la capacidad para producir electricidad, que podrá incluso exportar.
A mediados de julio, Adís Abeba anunció que había completado la primera etapa de llenado de la presa gracias a las abundantes lluvias, algo que hizo saltar las alarmas en Egipto y Sudán, que han remachado en incontables ocasiones que Etiopía no puede emprender 'acciones unilaterales' en este asunto porque sería pernicioso para el resto.
La GERD, con una inversión de unos 4.500 millones de euros, será la presa hidroeléctrica más grande de África cuando esté completada. EFE