El GNA denuncia la muerte de seis soldados egipcios en un combate en Trípoli
Trípoli, 26 feb (EFE).- Al menos seis soldados egipcios murieron en combates librados anoche en el sur de Trípoli entre fuerzas del mariscal Jalifa Hafter, el hombre fuerte de Libia (LNA), y milicias afines al Gobierno de Acuerdo Nacional sostenido por la ONU en la capital (GNA), reveló hoy a Efe Tahar ben Gharbiya, uno de los responsables militares de esta última institución.
Según su relato, que no ha sido confirmado ni desmentido por otras fuentes, un séptimo soldado resultó herido y fue detenido por dichas fuerzas en el eje de Al Jalatat, en el extrarradio meridional de la capital.
'Los soldados egipcios que combaten junto a milicias de Hafter realizaban una operación de rastreo en el eje de Al Jalatat. Los dejamos avanzar hacia este lugar y luego los bloqueamos. Seis murieron, uno fue capturado y otros huyeron', indicó Ben Gharbiya.
Las fuerzas del GNA destruyeron además dos vehículos blindados de fabricación emiratí y un tanque, agregó el militar, quien precisó que los soldados egipcios forman parte de dos grupos, uno de logística y otro especializado en artillería, que usa morteros de Hawzer y Haun.
'Hay casi 6.000 hombres armados que pertenecen a milicias sudanesas apoyadas por los Emiratos Árabes Unidos, y varios de ellos fueron asesinados', aseguró Ben Gharbiya.
Las fuerzas afines a Hafter lanzaron anoche varios misiles que impactaron en el aeropuerto civil de Matiga, único en funcionamiento en Trípoli, un ataque durante el cual una niña resultó herida.
Por otra parte, un civil murió y otros dos resultaron heridos cuando las fuerzas del LNA lanzaron proyectiles en la localidad del proyecto de Al Hadaba, según informó el encargado de comunicación en el Ministerio de Salud del GNA, Amin al Hashemi.
La actual guerra civil en Libia estalló en 2015 y se recrudeció en abril del pasado año, fecha desde la que han muerto más de 1.500 personas, cerca de 15.000 han resultado heridas y más de 130.000 se han visto obligadas a abandonar su hogar y a convertirse en desplazados internos.
El mariscal, que controla la mayor parte de las reservas petroleras, cuenta con el respaldo económico y militar de Rusia, Arabia Saudí, Egipto y Emiratos Árabes Unidos, y el político de Francia y de Estados Unidos.
El Gobierno sostenido por la ONU apenas domina la capital y recibe el apoyo económico y militar de Italia, Catar y Turquía, además del reconocimiento político de la Unión Europea. EFE