El plebiscito de Griezmann

Madrid, 14 sep (EFE).- Después de cortarse el pelo, la sucesión de vídeos del club y su gris reestreno contra el Espanyol, Antoine Griezmann se somete este miércoles al recibimiento de su afición en el Wanda Metropolitano, con aforo reducido, pero en un plebiscito sobre la vuelta del atacante francés, este miércoles ante el Oporto, con la duda de si será titular o no en el esquema de Diego Simeone.

Abroncado en sus dos visitas más recientes a ese campo (su placa de leyenda rojiblanca apareció con basura y ratas de peluche en 2019), ambas con el Barcelona, ahora regresa al estadio de nuevo con la camiseta del Atlético, la misma que defendió durante un lustro, de 2014 a 2019, con la que ganó tres títulos y con la que marcó 133 goles en 257 partidos para ser el quinto mejor de la historia.

Y la misma que abandonó en julio de 2019 para marcharse al Barcelona por los 120 millones de euros de su cláusula de rescisión (el Atlético exigía 200 millones), en un fichaje que se sostuvo en secreto hasta mediados de mayo, hasta que la prensa lo descubrió y el club rojiblanco lo confirmó a través del propio Griezmann.

Porque la última vez que el '8' rojiblanco, entonces el '7', jugó para el Atlético en el Wanda Metropolitano aún el seguidor no sabía que se iba definitivamente al Barcelona. Era, si acaso, nada más una intuición, aunque los gestos del atacante indicaban lo contrario... O no. Su agradecimiento a la afición, sus cánticos efusivos a Godín o Juanfran, que sí se despedían seguro, o sus golpes en el pecho, en el escudo, en aquel encuentro contra el Sevilla. 12 de mayo de 2019.

'La manera que compitió, que se entregó, sabiendo que era el último partido (de la temporada) en el Wanda, la comunión que hubo con la gente, que saludó a la afición, cómo se compatibilizó con ellos... Situaciones que son normales en un futbolista importantísimo para nosotros. Es uno de los capitanes que, a partir de la salida de Godín, pasará a ser segundo capitán. Le damos el afecto que tenemos, toda la importancia que tiene, el club ha hecho todo el esfuerzo para que esté con nosotros y él nos ha dado alegría, entusiasmo y que quiere estar', decía esa jornada Simeone.

Dos días después, Griezmann reveló su adiós, tras reunirse en su casa con Miguel Ángel Gil Marín, el consejero delegado; Andrea Berta, el director deportivo; y el propio Simeone: 'Después de hablar con el Cholo, Miguel Ángel y con la gente de los despachos, quería enseguida hablar con vosotros, atléticos, a la afición que siempre me ha dado mucho cariño, para deciros que he tomado la decisión de irme, de ver otras cosas, de tener otros desafíos'.

En julio de 2019 -incluso el día 7 lo reclamó para incorporarse a la pretemporada el Atlético-, el Barcelona y él ejecutaron su cláusula de rescisión. Y se fue, entre la 'más enérgica repulsa' del Atlético 'por el comportamiento de ambos, en especial del Fútbol Club Barcelona, por haber inducido al jugador a romper su vínculo contractual en un momento de la temporada donde el club se estaba jugando, no sólo la eliminatoria de la Liga de Campeones ante la Juventus, sino el título de Liga contra el propio Barcelona'.

Dos años después, ha vuelto Griezmann. ¿Cuál será su recibimiento? La duda de la última semana, desde el momento -el martes 31 de agosto al borde de la medianoche- en que se concretó su cesión por un año con opción a otro y de compra, se resolverá este miércoles. El delantero francés está ante un plebiscito. EFE

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