Filipinas pone en cuarentena estricta Luzón y endurece el cierre de Manila
(Actualiza con declaración de Duterte y nueva cifra de pacientes)
Manila, 16 mar (EFE).- El presidente de Filipinas, Rodrigo Duterte, ordenó hoy poner bajo estricta cuarentena toda la isla de Luzón, la mayor del país, y endureció las condiciones de cierre de la capital para contener la propagación del COVID-19.
'Pongo toda la isla entera de Luzón en cuarentena hasta el 12 de abril, coincidiendo con el fin de la Semana Santa', anunció hoy el mandatario en un mensaje televisado a los filipinos.
La isla de Luzón -donde se encuentra Manila- alberga unos 57 millones de habitantes, más de la mitad de la población del país.
Duterte explicó que la medida es 'de aplicación inmediata', ya que el foco del COVID-19 se está expandiendo por otras provincias de Filipinas, donde por el momento se han registrado 142 casos y 12 muertes, según el último recuento del Departamento de Salud.
Sin embargo, se sospecha que hay muchos más casos en el país sin detectar, ante la escasez de equipos de diagnóstico, ya que no se ha descubierto el origen de la transmisión del coronavirus en la mitad de los casos confirmados.
'No tenéis otra elección, hay que quedarse en casa', subrayó el presidente a los filipinos, a los que aseguró que habrá suficientes suministros de comida y medicamentos durante la cuarentena e insistió en la necesidad de mantener 'distancia social' de un metro en las interacciones con otras personas.
El área metropolitana de Manila, donde viven unos 13 millones de personas, se encuentra bajo 'cuarentena comunitaria' desde ayer domingo y sus accesos por tierra, mar y aire están cerrados, aunque sí se permite la entrada y salida de vuelos internacionales.
El mandatario aprobó hoy una cuarentena 'más estricta' en la capital y en todo Luzón, lo que obliga a las personas a permanecer en casa y la suspensión del trabajo tanto en el sector público y privado y el cierre de todo establecimiento.
Supermercados y farmacias permanecerán abiertos durante la cuarentena, y estarán operativos los cajeros automáticos, pero no las sucursales bancarias.
Además, rige desde hoy en la capital un toque de queda de 20.00 a 5.00 en el que no se pueden abandonar los domicilios bajo ningún concepto.
El cierre suave de la capital, que entró en vigor ayer, permitía entrar a la ciudad por motivos de trabajo y cierta libertad de movimientos dentro de Manila, algo que no será posible bajo la cuarentena estricta.
Además toda forma de transporte queda suspendida y se incrementará la presencia de tropas del Ejército y de la Policía Nacional para asegurar el cumplimiento de la cuarentena.
Filipinas también repatrió hoy a 444 filipinos -438 tripulantes y 6 pasajeros- del crucero MV Grand Princess en un vuelo chárter desde San Francisco a la ciudad de Clark, donde cumplirán cuarentena en la ciudad deportiva, mientras que otros 13 tripulantes que dieron positivo de COVID-19 están ingresados en EEUU. EFE

EFE