Francesca Thyssen: Debemos recordar que el Thyssen ya no es un museo privado
Madrid, 10 dic (EFE).- Francesca Thyssen-Bornemisza, hija del barón y patrona del Museo Thyssen-Bornemisza (MNTB), cree que la pinacoteca que se fundó en Madrid con la colección de su padre es un 'tesoro nacional', y por eso es importante que 'todos tengan en cuenta que el Thyssen ya no es un museo privado', ha dicho a Efe.
La hija del barón, que hoy firma en Córdoba (ciudad del sur de España) un acuerdo para mostrar la colección de su fundación TBA21 en esa capital, espera que finalmente se ratifique el acuerdo por la colección de la baronesa, algo que 'todo el mundo quiere'.
Carmen Thyssen y su hijo Borja 'deben llegar a un acuerdo sobre quién tiene qué y formalizar este acuerdo', de lo contrario, apunta la hija del barón, 'seguirá habiendo retos'.
'Es importante recordar que este es un Museo Nacional, no es privado, ningún miembro de la familia debe considerarlo su espacio', argumenta a Efe Francesca Thyssen.
El pasado enero, Carmen Thyssen y el Gobierno español alcanzaron un acuerdo por su colección de 6,5 millones de euros anuales, 15 años y la vuelta del 'Mata Mua', pero todavía no se ha firmado. En una entrevista con el diario ABC en junio, Carmen Thyssen hablaba de diferencias con su hijo por el reparto de su herencia.
'Este es sin duda el gran momento de Tita, bien merecido, pero para que el trato se lleve a cabo debe haber un acuerdo firmado entre ella y Borja, para resolver sus asuntos privados de antemano', ha dicho la hija del barón, que 'valora enormemente' el trabajo de Carmen Thyssen, pero se muestra preocupada por 'la reputación del museo'.
Francesca Thyssen, que lleva dos décadas al frente de su fundación TBA21, ha prestado al museo una serie de obras con motivo del centenario de su padre. Entre ellos varios cuadros que su padre le legó y que podrían incorporarse a la colección permanente. 'Depende de una cuestión de espacio', ha dicho.
'Mi padre quiso que yo tuviera esos cuadros, soy responsable de ellos -argumenta- y de que estén disponibles al público, era su sueño'.
Según Francesca Thyssen, todos los miembros de la familia deben contribuir al museo. Para su hermano Borja, con quien habla habitualmente, contribuir 'es importante' y lo hace con un 'gran sentido de la responsabilidad', asegura.
Para la mecenas, que lleva dos décadas al frente de su fundación, es vital preguntarse a dónde se dirige el museo en las próximas décadas: 'La pregunta es cuándo puede el museo pasar al siglo XXI y cómo pueden las generaciones más jóvenes contribuir al espíritu de continuidad. ¡Espero tener esa conversación con el Ministerio de Cultura cuando sea el momento adecuado!'.
Francesca Thyssen alcanzó un acuerdo con el Museo Thyssen para hacer exposiciones de arte contemporáneo en la pinacoteca durante cuatro años: se han cumplido dos y está muy contenta con el resultado.
Es un programa que define como 'modesto', a diferencia del proyecto de Córdoba, pero del que asegura estar muy satisfecha con la respuesta del público y 'el entusiasmo generalizado' que ha generado su trabajo. EFE
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