Grecia desaloja el centro de refugiados de Pikpa, modelo de acogida digna

Atenas, 30 oct (EFE).- El Gobierno griego desalojó este viernes el centro de acogida de refugiados Pikpa, en la isla de Lesbos, que ha ofrecido un hogar a algunas de las personas más vulnerables llegadas a las costas griegas en los últimos años, a pesar de las protestas de ONG.

A primera hora de la mañana un operativo policial llegó al centro, donde informó a las 74 personas alojadas allí, entre las cuales se cuentan unos 30 menores, de su traslado al antiguo campo de Kará Tepé, que el Gobierno también planea cerrar.

Todos ellos fueron subidos a autobuses mientras la mayoría del personal de la ONG local Solidaridad de Lesbos, que gestiona Pikpa, así como abogados, psicólogos, periodistas y voluntarios permanecieron en los alrededores pues la Policía no les permitió el acceso al campo durante su desalojo.

El ministro de Migración, Notis Mitarakis, anunció el cierre de Pikpa y Kará Tepé inmediatamente después de la puesta en marcha del nuevo campo 'provisional', donde instalaron a miles de solicitantes de asilo que se alojaban en el campo de Moria, destrozado por varios incendios el 8 y 9 de septiembre.

Desde el anuncio del ministro de Migración, decenas de organizaciones humanitarias, entre las que se incluyen Amnistía Internacional, Médicos del Mundo, Médicos sin Fronteras o Human Rights Watch, pidieron la revocación de la decisión, sin éxito.

Tanto Pikpa como Kará Tepé -en su caso administrado por el Ayuntamiento de Mitilene- han sido la otra cara de la moneda de la acogida en la isla de Lesbos, frente a Moria.

Mientras la fama de éste no hacía más que crecer por las condiciones indignas, insalubres e inseguras en las que llegaron a vivir 20.000 personas en su peor momento, estos dos pequeños centros ofrecían refugio a víctimas de tortura, menores no acompañados, madres solteras y personas con problemas de salud graves.

Pikpa fue creado en 2012 en un antiguo campamento juvenil como un centro de acogida abierto y autogestionado y su directora, Efi Latsudi, llegó a recibir en 2016 el premio Nansen para los Refugiados del Acnur, que destaca anualmente la labor sobresaliente de individuos u organizaciones dedicadas a la protección de personas refugiadas, desplazadas y apátridas.

La justificación del Gobierno para cerrar Pikpa es que el centro está ubicado en un terreno público 'que ha sido ocupado en los últimos años sin ningún tipo de control' y que el traslado de los 74 beneficiarios llevará a 'la devolución de la zona al Estado, que lo usará para el beneficio de la comunidad local'.

El jefe de misión de Médicos Sin Fronteras (MSF) en Grecia, Stephan Oberreit, calificó la decisión de 'absurda porque la prioridad deberían ser las muchas personas vulnerables que viven en el principal campo de Lesbos en una situación completamente inadecuada'. EFE

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