Irak reivindica nuevo rol de mediador en Oriente Medio con apoyo de Francia

Bagdad, 28 ago (EFE).- El primer ministro iraquí, Mustafa al Kazemi, revindicó este sábado en una conferencia que organizó en Bagdad y reunió a líderes y representantes de Oriente Medio su nuevo papel como mediador en la región con el apoyo del presidente francés, Emmanuel Macron.

'El rol histórico de Irak puede ser uno de los pilares de la estabilidad en la región y hemos establecido una base sólida para definir este papel, comenzando por negarnos a usar las tierras iraquíes como escenario de conflictos regionales e internacionales o como punto de partida para la agresión contra sus vecinos', afirmó en el discurso de apertura de la Conferencia de Cooperación y Asociación de Bagdad, que tiene lugar hoy.

Indicó que la convocatoria de esta conferencia 'encarna la visión iraquí' para establecer 'mejores relaciones con los países del mundo sobre la base de la cooperación, la integración, la no injerencia en los asuntos internos y el predominio del lenguaje del diálogo, las cooperaciones y el respeto mutuo'.

En lo que respecto al terrorismo, un tema predominante en la cumbre, Al Kazemi indicó que aspira a hacer más avances 'en la reconstrucción', especialmente en la infraestructura del país 'que ha sufrido grandes daños durante décadas por guerras absurdas, mala gestión, terrorismo y armas descontroladas'.

Por otro lado, Macron realzó el papel de Irak y su compromiso a apoyar al país a las fuerzas de seguridad en su misión antiterrorista contra las células del grupo yihadista Estado Islámico (EI) que siguen operando en el páis, pese a que en 2017 Bagdad declarara el fin territorial de la organización.

'La conferencia de hoy muestra la voluntad de cooperación, de construir alianzas a pesar de las disputas y malentendidos', indicó, y añadió que la región de Oriente Medio 'necesita foros en los que todos pueden hablar entre sí para solucionar las disputas que existen'.

Pese a que no hubo ninguna referencia explícita, uno de los objetivos de la cumbre era juntar en la misma mesa a los archienemigos Irán y Arabia Saudí, países que han enviado a la cumbre de Bagdad a sus ministros de Exteriores.

A principios de este año, Irak organizó rondas de conversaciones que se llevaron en secreto hasta que fueron confirmadas oficialmente días después entre Arabia Saudí e Irán, algo significativo pero que no ha llevado a avances en el terreno.

Irak, de mayoría chií, se encuentra en la línea divisoria entre el chií Irán y el resto de países árabes de la región, mayoritariamente suní y liderado por Arabia Saudí, estados rivales por la supremacía regional.

El presidente egipcio Abdelfatah al Sisi y el rey Abdalá II de Jordania participan en esta cumbre, así como el emir catarí Tamim bin Hamad al Zani, el ministro de Exteriores de Turquía, Mevlüt Çavusoglu y el vicepresidente de Emiratos Árabes Unidos, Mohamed bin Rashid al Maktum, entre otros. EFE

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