Jordanos pueden volver a conducir tras 39 días de prohibición por COVID-19

Amán, 29 abr (EFE).- Los jordanos pueden volver a usar este miércoles sus vehículos 39 días después de que el Gobierno, el más severo en la aplicación de restricciones en la región, impusiera una serie de prohibiciones que les han obligado a caminar como única opción para ir a conseguir suministros.

El tráfico de coches privados está permitido entre las 6.00 y las 18.00 horas y está restringido a las matrículas pares e impares en días alternos, según informó el lunes el viceministro de medios de comunicación, Amjad Adaileh, al anunciar la relajación de las medidas.

El Gobierno jordano, que ha impuesto las restricciones más duras de la región para hacer frente a la pandemia, decretó un toque de queda nacional el 21 de marzo e incluso intentó aplicar entonces un sistema de venta de productos básicos a domicilio supervisado por las autoridades que no funcionó y se levantó poco después.

Tras el fracaso del sistema de reparto y el cierre temporal de todos los establecimientos, se permitió a los ciudadanos desplazarse a los supermercados y tiendas, una tarea que sólo se podía llevar a cabo a pie hasta este miércoles debido a la prohibición de utilizar los vehículos.

Centenares de personas fueron arrestadas sólo en los primeros días por violar el toque de queda.

El Gobierno indicó que permitirán a dos personas por coche, pero los vehículos solo podrán circular dentro de los límites de cada provincia a no ser que se cuente con un permiso especial y tampoco podrán viajar por carretera los menores de 16 años ni los mayores de 60 años.

Además, el viernes se implementará de nuevo un toque de queda de 24 horas.

En otra comparecencia televisada anoche, Adaileh anunció la relajación de las restricciones al movimiento en tres provincias, donde se podrán utilizar todos los vehículos en el horario estipulado independientemente de su matrícula.

Con ello, se elevan a 8 de 12 las regiones del país declaradas libres del virus, mientras Jordania comienza su retorno gradual a la normalidad tras no haber registrado ayer ningún caso nuevo de COVID-19 y sólo una muerte, de acuerdo con el ministro de Salud, Saad Jaber.

Este levantamiento paulatino de las restricciones se produce en pleno comienzo del mes sagrado musulmán de Ramadán.

Según los últimos datos difundidos anoche por la Organización Mundial de la Salud, el país ha registrado hasta el momento 449 contagios, 8 fallecimientos y 348 recuperaciones. EFE

EFE

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