La izquierda italiana tratará de conservar su bastión regional ante Salvini
Roma, 25 ene (EFE).- La izquierda italiana tratará mañana de conservar su histórico bastión, Emilia-Romagna (norte), frente al avance del ultraderechista Matteo Salvini, en unas elecciones regionales que también tendrán lugar en Calabria (sur) y que servirán para tomar el pulso al Gobierno nacional.
Mañana domingo casi cinco millones y medio de italianos están llamados a las urnas en Emilia-Romagna (3,5 millones) y Calabria (1,9) desde las 7.00 hasta las 23.00 locales (6.00-22.00 GMT).
En el caso de la primera región, los dos candidatos principales son el presidente saliente, Stefano Bonaccini, del Partido Demócrata (PD, centroizquierda), y la senadora Lucia Borgonzoni, apoyada por la coalición de partidos de derechas liderada por Salvini.
En Calabria, gobernada desde 2014 por la izquierda, compiten la candidata de derechas, Jole Santelli, favorita en todas las encuestas; el de izquierda, Filippo Callipo; el del Movimiento 5 Estrellas (M5S), Francesco Aiello, y el independiente Carlo Tansi.
LA DESEADA REGIÓN 'ROJA'
En cualquier caso toda la atención se centra en Emilia-Romagna, la histórica región 'roja' de Italia, tierra de partisanos gobernada por la izquierda durante los últimos 70 años de democracia y en donde los partidos se han volcado.
Y todo apunta a que será un duro pulso, pues todos los sondeos dan muy igualados a ambos bloques.
El candidato de izquierdas, Bonaccini, se centró en resaltar los logros de esta región, una de las más avanzadas e industrializadas, que crece a mayor ritmo y una de las cinco -de un total de 20- con un 'alto' nivel de vida, según la Oficina Europea de Estadística.
En cambio Salvini clama continuamente por la renovación tras décadas de hegemonía de izquierdas y, por esa razón, se ha esforzado en la campaña, eclipsando incluso a su candidata, Borgonzoni.
Fiel a su bronco estilo, el ultraderechista ha protagonizado todo tipo de polémicas, como cuando llamó al interfono de una familia de tunecinos en la periferia de Bolonia para preguntar si traficaban con drogas.
Tampoco dudó en cerrar su campaña en la localidad de Bibbiano, epicentro de un oscuro escándalo por irregularidades en la asignación de niños de acogida que salpica a dirigentes del PD.
O lanzó una campaña de ayuno entre sus seguidores después de que el Senado diera los primeros pasos -con sus votos a favor- para quitarle la inmunidad y permitir su enjuiciamiento por bloquear una nave con inmigrantes en junio, cuando era ministro del Interior.
UN MENSAJE DE FUERZA AL GOBIERNO NACIONAL
Y es que Salvini ve en estos comicios regionales, sobre todo los de Emilia-Romagna, una oportunidad de oro para mostrar músculo y erosionar a los dos partidos principales en el Gobierno nacional, el PD y el antisistema Movimiento Cinco Estrellas (M5S).
Pues todos sus esfuerzos están dirigidos a regresar al Gobierno, del que salió en agosto tras dinamitar su coalición con el M5S en un intento fallido de adelantar elecciones, evitadas con el surgimiento de este nuevo Ejecutivo con el centroizquierda del PD.
Así, Salvini, a la cabeza de una coalición con otras fuerzas de derecha como la Forza Italia de Silvio Berlusconi, quiere conquistar el bastión 'rojo' como hizo en 2019 con Piamonte (noroeste), Umbria (centro), Abruzos (centro), Cerdeña (oeste) y Basilicata (sur).
Y seguir así presumiendo de liderar el partido más votado del país, la Liga, como demostraron las elecciones europeas, en las que quedó en primer lugar con el 34,3 % de las papeletas.
En este contexto, un inédito triunfo de la derecha en Emilia-Romagna supondría un duro varapalo para la izquierda y, por ende, para el Ejecutivo, según coinciden todos los analistas.
Tal es su obcecación con estas elecciones regionales que incluso hoy, jornada de reflexión, sigue lanzando filípicas a través de sus redes sociales: 'Primero les mandamos a casa el domingo y después damos el aviso de desahucio al Gobierno', publicó en Twitter.
LAS SARDINAS SALEN A LA CALLE
En cualquier caso ha sido en Emilia-Romagna donde Salvini y sus socios se han encontrado de frente con el movimiento ciudadano de las 'sardinas', que ha logrado propagarse por todo el país con su mensaje contra el soberanismo y el populismo.
Y ha sido en las calles de Bolonia, de Ferrara, de Módena o de Parma donde se han convocado manifestaciones multitudinarias en las que no faltó el himno partisano del 'Bella ciao' para expresar su oposición al avance de la ultraderecha. EFE