Mohamed VI ordena próxima repatriación de 38.000 marroquíes del extranjero
Rabat, 28 may (EFE). El rey Mohamed VI de Marruecos ordenó una próxima repatriación de los 38.000 marroquíes atrapados en el extranjero, con una media de 300 personas cada semana, aseguró hoy el ministro marroquí de Sanidad, Jaled Ait Taleb.
Sin embargo, Ait Taleb no dio una fecha para el comienzo de la operación para repatriar a los marroquíes bloqueados en el extranjero después de que Rabat cerrase sus fronteras el 13 de marzo como medida de prevención contra la propagación del coronavirus.
El responsable marroquí añadió durante una comparecencia ante la Comisión de los Sectores Sociales en la Cámara de Representantes (baja) del Parlamento marroquí, que tras su llegada al país los repatriados serán sometidos a una cuarentena de nueve días.
Además, señaló que la cifra semanal de las personas repatriadas podrá ir aumentando de acuerdo con el desarrollo de las capacidades de su Gobierno.
Algunos medios han publicado que el Gobierno tiene previsto todo un plan de repatriaciones en el que ha implicado a la aerolínea nacional Royal Air Maroc, a varios aeropuertos y a distintos hoteles en varios lugares del país en los que los repatriados deberán cumplir su cuarentena.
Marruecos cerró sus fronteras el pasado 17 de marzo, lo que sorprendió a esos 38.000 ciudadanos en el exterior, por razones de turismo, visitas familiares o negocios.
A principios del pasado mes de abril, unos 530 marroquíes atrapados en diferentes países del mundo, la mayoría de ellos en Francia, pidieron en una carta abierta al rey Mohamed VI que les ayudara a volver al país.
El pasado 11 de este mes, varios grupos de estos marroquíes protagonizaron protestas ante las misiones consulares de su país; sus participantes compartieron fotos de estas acciones ante los consulados de Estambul, Algeciras, Argel o París, entre otros.
Desde que el Gobierno decretó el cierre total del espacio aéreo, marítimo y terrestre marroquí, solo han podido retornar medio millar de marroquíes a su país por la frontera terrestre desde las ciudades españolas de Ceuta y Melilla.
La situación de estos marroquíes, entre los que hay casos de personas enfermas, ancianos o mujeres embarazadas, ha llamado la atención por tratarse de una de las decisiones más drásticas tomadas por un país con sus propios nacionales durante esta pandemia mundial. EFE