Nombres de barrios en Yuba cuentan historias de la guerra civil en Sudán.
Atem Simón Mabio
Yuba, 21 feb (EFE).- Algunos barrios de la ciudad de Yuba tienen nombres de vacíos, de soldados, de órdenes de militares y de cosas que pasaron durante la guerra que vivió Sudán del Sur entre 1983 y 2005. Hoy son un mapa para navegar por la historia del conflicto en la capital del país más joven del mundo.
Yuba fue sede de la comandancia militar del gobierno durante la guerra entre Sudán y los insurgentes del SPLM, que actualmente gobiernan Sudán del Sur.
En medio del conflicto muchos decidieron huir a otras zonas dentro de Sudán o a países vecinos como Kenia, Uganda y Etiopía, para que no fueran acusados de colaboracionistas por la insurgencia liderada por el movimiento popular.
Más que una ciudad, Yuba se convirtió en un cuartel militar donde vivían pocos ciudadanos sureños en barrios confinados en un espacio limitado.
BARRIOS PARA DEFINIR LA VIDA
En esas circunstancias fueron surgiendo los nombres de los barrios durante la guerra. El barrio de Yalaba, en el norte de Yuba, significa 'portadores', en alusión a los comerciantes que traían mercancías desde el norte de Sudán y las vendían allí.
Pero los nombres iban más allá. Atla Bara, que significa “sal fuera”, era la orden que daban los soldados del ejército sudanés para que los hombres de este barrio salieran de sus casas cuando inspeccionaban estas zonas por la noche.
En el centro de Yuba también se encuentra el barrio Riyal Mafi, que significa “sin hombres” porque durante la guerra los hombres de esta zona huyeron por miedo a perder sus vidas o para unirse a la insurgencia.
Entre los nombres más extraños de las diferentes zonas en Yuba se encuentra el mercado de Libas Mafi, o “sin ropa”, un nombre que parece asociar la zona con el comercio sexual o la prostitución durante el último período de guerra.
En Monique, en el oeste de Yuba, se encuentra el mercado de Sug Malitia, o “el mercado de milicia” que probablemente era el cuartel general de una milicia sureña que estaba luchando junto al ejército sudanés contra los rebeldes del Ejército de Liberación del Pueblo de Sudán.
El investigador y dramaturgo sursudanés Nicola Franco, explicó a Efe que 'estos nombres surgieron como resultado de las guerras civiles que se produjeron entre el sistema gubernamental en Sudán y las revolucionarios armados en Sudán del Sur'.
MEMORIA DE UN CONFLICTO
Peter Kenyi, un residente de 74 años del barrio de Riyal Mafi (“sin hombres”), dijo a Efe que el nombre del barrio ha sido relacionado con la historia de la zona y las terribles masacres cometidas por el Ejército sudanés durante los años de la guerra civil.
Eso obligó a que los hombres huyeran por miedo a sus vidas y se unieran a los rebeldes en los bosques del sur, mientras otros huían a países vecinos como Kenia y Uganda.
Defiende que hay que mantener el nombre como un recuerdo de lo que ocurrió.
'No aceptaremos cambiarlo por ningún nombre, porque somos nosotros los que ponemos el nombre a nuestro barrio y queremos que nuestros hijos y nietos lo sepan”, dijo.
“La historia no puede ser olvidada, pase lo que pase, todavía usamos el nombre del barrio en los papeles y documentos oficiales como certificados de vivienda, nacimiento y nacionalidad', agregó.
CAMBIAR O NO CAMBIAR
El alcalde de la ciudad de Yuba, Juma Samir, declaró la semana pasada que tienen la intención de cambiar algunas calles y barrios de la capital Yuba, y añadir nombres de algunas ciudades del país.
Pero para Lado Phanuel, un residente de 55 años del barrio Sug Militia, que trabaja como empleado de la Autoridad de Electricidad, es mejor no cambiar el nombre del barrio porque el nombre popular que se ha adoptado tiene una gran peculiaridad y lleva una parte de la historia de toda la ciudad .
“Es necesario que las personas continúen usando este nombre, ya que es un nombre popular que logró bastante fama. Hasta el gran mercado vecino también llevó el mismo nombre', dijo.
Para el hombre el gobierno no podrá cambiar los nombres 'porque la gente común se aferrará a esos nombres y Franco va más allá.
'Debe guardarse para recordarnos esos hechos que esperamos que no se repitan nuevamente', dijo. EFE

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