Socialistas se retiran de las conversaciones para formar gobierno en Noruega
Copenhague, 29 sep (EFE).- El Partido de Izquierda Socialista se retiró este miércoles de las negociaciones para formar gobierno en Noruega con laboristas y centristas, después del claro triunfo del centroizquierda en las elecciones legislativas de hace tres semanas.
La salida de esta fuerza de la mesa de negociaciones abre el camino a la formación de un gobierno de minoría entre laboristas y centristas, que suman 76 de los 169 escaños del Parlamento.
El líder socialista, Audun Lysbakken, explicó la decisión por las diferencias en áreas como recorte de emisiones, política petrolera, impuestos y estado de bienestar.
'Estamos muy decepcionados de que no haya una base política para formar un gobierno rojiverde esta vez', dijo en conferencia de prensa Lysbakken, aludiendo a que las tres fuerzas ya gobernaron juntas entre 2005 y 2013.
Lysbakken señaló que su partido no actuará tampoco de apoyo para la mayoría del ejecutivo y se situará en la oposición, aunque abrió la puerta a negociar los presupuestos o a entrar más adelante en el gobierno, si se negocia con 'papeles en blanco'.
Durante la campaña electoral, laboristas y socialistas se habían mostrado partidarios de un gobierno de coalición entre los tres, mientras el Partido Centrista quería gobernar solo con aquellos.
'Es mucho más lo que nos une que lo que nos separa', dijo después de los comicios el líder laborista, y previsiblemente próximo primer ministro, Jonas Gahr Støre.
Entre las áreas de conflicto figura la política petrolera, un tema sensible en el principal exportador de crudo de Europa occidental: centristas y laboristas abogan por desarrollar el sector petrolero pero los socialistas defienden un cese progresivo de la actividad exploratoria.
La entrada en el gobierno de las otras dos fuerzas del bloque de centroizquierda, Verdes y Rojo, parece aún más improbable, porque los desacuerdos en política fiscal y medioambiental son mayores.
El centroizquierda, liderado por el Partido Laborista, obtuvo el 56 % de los votos en los comicios del pasado día 13 por el 40,5 % del bloque de derecha de la primera ministra conservadora, Erna Solberg, que gobernaba desde 2013. EFE
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