Tribunal de Malasia pospone la deportación de 1.200 birmanos
Bangkok, 23 feb (EFE).- El Tribunal Superior de Kuala Lumpur decidió este martes posponer la deportación de 1.200 birmanos, que estaba prevista para hoy, tras aceptar un recurso presentado por las oenegés Amnistía Internacional (AI) y Asylum Access.
El abogado Lim Wei Jiet, que representa a las organizaciones garantes de derechos humanos, confirmó en Twitter que el tribunal ha parado temporalmente la deportación y ha programado una vista para la mañana del miércoles donde decidirá sobre la expulsión.
Mientras tanto, barcos de la Marina birmana se encuentran atracados en la base naval Lumut, a unos 150 kilómetros al norte de Kuala Lumpur, y preparados para proceder a trasladar a los inmigrantes birmanos retenidos en centros de detención de Malasia y que regresarían a un país turbulento tras sufrir un golpe de Estado.
AI denuncia los planes del gobierno malasio y recordó que las deportaciones realizadas sin transparencia contravienen las obligaciones del país de respetar los derechos de los migrantes y refugiados y ponen en riesgo sus vidas.
'Nos basamos en las informaciones de que grupos de refugiados y solicitantes de asilo se encuentran entre las personas que van a ser devueltas a Birmania', apunta Katrina Jorene Maliamauv, directora ejecutiva de AI en Malasia, quien señala que también se encontrarían en el grupo 17 menores con al menos un progenitor en Malasia.
“Separar a los niños de sus padres es una práctica extremadamente inhumana que pone a estos menores en grave riesgo y va en contra del interés superior del niño”, incide Maliamauv.
El gobierno malasio había aceptado una oferta del gobierno birmano para enviar en barcos militares a los 1.200 inmigrantes birmanos este 23 de febrero.
Aunque se ha comprometido a respetar a todos aquellos que presenten una tarjeta de refugiados de la Alta Comisión de la ONU para Refugiados, Malasia no ha permitido a este organismo entrar en centros de detención de inmigrantes desde agosto de 2019, por lo que no ha podido identificar a los buscadores de asilo. EFE