Garantiza un impacto ambiental mínimo por exploración de tierras raras en Pedernales

El director del Servicio Geológico Nacional (SGN), Santiago Muñoz, aseguró ayer que tendrán un impacto ambiental mínimo las exploraciones autorizadas el lunes por decreto para determinar posibles yacimientos de tierras raras en Pedernales, una iniciativa a la que no se opone la Academia de Ciencias.

“Cuando se explora, comunmente el impacto es muy mínimo e incluso, cuando se toma muestra de un mineral en un sitio (...), lo que se hace es un pequeño hueco de 10 centímetros, 20 centímetros”, explicó Muñoz. “Luego se vuelve y se tapa, y la vegetación se reacondiciona”.

De usarse una perforadora, el funcionario también aseguró que la zona se rehabilita.

Un documento preparado por el SGN detalla que estudios preliminares indican que la bauxita de Bahoruco tiene contenidos altos en tierras raras, un nombre dado a dos series de elementos químicos llamados actínidos y lantánidos. Estos forman un grupo de 17 elementos, y tienen aplicaciones en tecnología de alta gama como láser para medicina, tabletas, teléfonos, televisores LED, aeronáutica, carros hídricos y otros. Aunque se les llame raras, de estos elementos hay abundancia en la Tierra.

El informe del SGN destaca que en un proyecto ejecutado a partir de 2015 con la Universidad de Barcelona se tomaron más de 50 muestras en los depósitos de bauxita de Las Mercedes y Aceitillar en Pedernales. Los resultados preliminares arrojaron que los del tipo Aceitillar están “sistemáticamente enriquecidos en Tierras Raras Ligeras” y en “Tierras Raras Pesadas con respecto a Las Mercedes”.

En otro proyecto ejecutado con el Instituto Geológico y Minero de España, se hizo un muestreo geoquímico de más de 400 muestras, y de estás, sobre las 250 fueron enviadas al laboratorio Bureau Veritas Minerals en Vancouver, Canadá. Este análisis permitirá conocer la distribución espacial de cada elemento. El área que contiene bauxita en Las Mercedes y Aceitillar está en un sistema montañoso de la Sierra de Bahoruco. Los puntos de interés exploratorio también abarcan terrenos de los parques nacionales Sierra de Bahoruco y Jaragua, aunque Muñoz garantiza que solo con fines de estudio.

“En cualquier país se investigan los recursos que hay en el territorio con la finalidad de conocer lo que se tiene. Ya en el proceso, si es un parque, tú no vas a otorgar una concesion de explotación”, afirmó Muñoz.

En comunidades incluidas en el decreto hay un problema de décadas de falta de títulos de propiedad. Muñoz adelantó que, en caso de encontrarse una cantidad de recursos factibles para llamar a una concesión, se harán los estudios ambientales y se llegará a acuerdos con los ocupantes de los terrenos en cuestión.

“El mayor enemigo de la parte ambiental es la pobreza porque hay gente que se opone a la minería pero entonces, para la gente sobrevivir, tumban los árboles, acaban con los ríos y entonces el daño es mayor”, dijo Muñoz.

Pedernales es una de las provincias más pobres del país, con una tasa de desempleo superior a 23.7. El tiempo que abarcará la exploración es impreciso. Lo que sí estima Muñoz es que tomará años.

Academia no se opone pero está atenta

El vicepresidente de la Academia de Ciencias de la República Dominicana, Eleuterio Martínez, dijo a Diario Libre que la institución no se opone a la exploración de tierras raras.

“Lo que a nosotros nos preocupa en la Academia es que el Ministerio de Energía y Minas no tenga un marco regulatorio, no tenga una ley que rija sus acciones, porque la que tienen tiene 50 años ya (...); que aparezcan tierras raras, si están fuera de las áreas protegidas, eso no es problema”, expresó.

Agregó que, de encontrarse los recursos durante las exploraciones, que sirven para desarrollos tecnológicos, y si se hacen con responsabilidad, la Academia lo aplaude.

Mariela Mejía