Campesinos "siembran agua" para evitar que los ríos desaparezcan

Leónidas Delgado en la parcela de la familia.
PADRE LAS CASAS. "Si no hay reforestación se nos acaba el agua. Si respiramos aire puro siempre tendremos salud", es la convicción que por generación ha llevado a la familia De los Santos Delgado a conservar durante décadas seis mil tareas plantadas. 

En Las Cañitas, lugar montañoso y apartado donde residen, sólo esta porción de terreno está reforestada. El mapa de Google muestra cómo el resto de la zona, ubicada a dos horas de Padre Las Casas, se encuentra completamente pelada. 
 



 
"Preserva la naturaleza y ésta devolverá al hombre todo lo que hace por ella", es el lema de la Federación de Campesinos hacia El Progreso. 

En Blanco, Bonao, para sembrar agua también utilizan el río, que suple de energía a las comunidades a través de hidroeléctricas. Asimismo, orientan su producción hacia cultivos perennes -café, cacao, frutales-, con lo que persiguen alejar a los campesinos de realizar conuquismo. 

"La siembra de habichuela o el conuquismo, que es lo que se ha hecho en las montañas, no contribuye más que a deteriorar la cuenca", afirma el director ejecutivo de la Federación, Esteban Polanco, quien tiene alrededor de 25 años trabajando con la cuenca alta del río Yuna en busca de preservarla.
 
En efecto, la quema de bosque para producir carbón y para la agricultura (conuquismo) son las principales amenazas ambientales que en estos momentos enfrenta el país, reconoció meses atrás el ministro de Medio Ambiente y Recursos Naturales, Bautista Rojas Gómez . 

En Blanco, la conservación la vinculan con el bienestar de la gente. Por eso promueven, entre otras cosas, la siembra de café y de bambú, que además de garantizar la sostenibilidad de los suelos, también avala beneficios económicos a los campesinos. 

"Aquí nosotros producimos al año alrededor de 150 mil plantas de café. Soñamos con producir alrededor de 250 mil, porque la cuenca ahora está demandando mucho café por el daño que le causó la enfermedad de la roya a los cafetales", indicó Polanco.

"Fomentamos la siembra de plantas que ya están desapareciendo de nuestro hábitat. El Col, la Cabilma de Guinea, la Manacla, Amacei", añadió. 

Esteban Polanco relata que ha librado muchas luchas por preservar los recursos naturales. 

"Aquí en la cuenca de Blanco hay una mina de oro por la que nosotros duramos siete años luchando contra su explotación, es una amenaza permanente que tenemos", apuntó. 

Fue víctima de un atentado hace siete años.
 
"Me tiraron una bomba y me quemaron el 45 por ciento del cuerpo, se tiene la sospecha de que mi lucha estuvo relacionada con eso", relató. 

Esteban cree en la regeneración del bosque de manera natural. 

"Antes de sembrar en cuenca alta, lo ideal es ver primero si hay posibilidad de que el bosque se regenere solo, para que surja lo endémico y nativo que hay ahí. Nosotros hemos trabajamos así y por eso hemos logrado la conservación de un área tan importante como ésta", subrayó mientras se sumergía en el bosque húmedo de árboles frondosos y lo mostraba al equipo de DL. 
 
Por sus iniciativas de reforestación en cuencas y otros espacios naturales que abastecen de agua a poblaciones, ganó el premio Arturo Grullón. 

Más allá del bosque, ¿es posible sembrar agua?

primera semana de octubre de este año, 2, 507 millones de galones, según la Corporación del Acueducto y Alcantarillado de Santo Domingo (CAASD). 

Por esa razón, dentro de su campaña a favor del agua, la empresa privada recomienda a la ciudadanía ahorrar agua; involucrarse en el saneamiento de las cañadas; no echar la grasa por el fregadero, para no contaminar; evitar usar cemento en exceso.

"En lugar de cubrirlo todo con asfalto, podemos usar pavimentos con arena o grama y así el agua se infiltra en el subsuelo y no se hacen inundaciones, eso es sembrar agua", resalta Julia.

La estatuilla 

 
Los ganadores, además de recibir RD$250 mil pesos por cada premio, también recibieron una estatuilla elaborada en madera de Guayacán, árbol nativo del sur de la isla. La base que la soporta es de travertinos (roca sedimentaria) y el porta placas de caoba. La estatuilla simula una gota de agua. 

"El concepto de la escultura era crear la percepción de que el Guayacán en forma de gota de agua cae y se desliza sobre el mármol que representa la tierra y la caoba la semilla adherida a ella que la hará germinar". 

El concurso lo realizarán cada año en busca de estimular la protección de los recursos naturales guiada de la mano del hombre.