Cuando los charcos se apropian de las aceras

Santo Domingo. Podría ser a causa de las constantes lluvias que las últimas semanas han afectado gran parte del territorio nacional, o posiblemente el drenaje de la ciudad está en las mismas de siempre: ya no funciona con la capacidad de evitar que horas después de un aguacero los charcos, casi lagos, permanezca hasta por varios días y dificulten el libre tránsito. Y este charco, cercano al cruce de la avenida Bolívar con la calle Palo Hincado, en las cercanías del parque Independencia, resulta un obstáculo con el que es difícil lidiar y que no deja otra opción que jugar a ser equilibristas.