Un “géiser” maloliente en avenida Quinto Centenario

Los vecinos y transeúntes, tanto peatones como conductores, de la avenida Quinto Centenario tuvieron ayer una escena que se ha vuelto común desde la inauguración de la segunda línea del Metro de Santo Domingo: la expulsión de agua cloacal en la vía debido a la obstrucción de las tuberías del drenaje luego de la construcción del tren subterráneo. La situación, que ayer se asemejó bastante a un géiser, aunque sin las aguas termales, tiene ya desesperados a los usuarios de la vía rápida y al borde de la locura a los residentes de la zona, quienes no aguantan más el mal olor. Explicaron que la expulsión de agua residual y cloacal sucede luego de las lluvias.