Cuando se conduelan de calles de Villa Francisca

SANTO DOMINGO. Un polígono no mayor de 200 metros cuadrados, formado por las calles Barbarín Mejía, Albert Thomas y Rafael Atoa contiene una serie de problemas no resueltos desde hace años, tantos que parece histórico, por el Ayuntamiento del Distrito Nacional, la Corporación del Acueducto y Alcantarillado de Santo Domingo y el Ministerio de Obras Públicas y Comunicaciones.

Se trata de un área verde usada como taller de mecánica y desabolladura, en la calle Rafael Atoa, esquina Barbarín Mejía; un problema de drenaje sanitario en la intersección de las vías Atoa y Albert Thomas y el deterioro del badén y el asfalto de las referida intersección.

Los moradores se quejan de la falta de atención por parte de las autoridades, pese a la importancia que este tramo vial tiene para el tránsito de vehículos pesados del Gran Santo Domingo, los cuales a partir de enero serán más los que atraviesen la vía, debido a la prohibición de camiones por la avenida George Washington.

Los residentes sienten que, pese a los años, ninguna autoridad se ha preocupado.