Defensora del Pueblo dice no permitirá “grupo de millonarios” se quede con Las Maravillas

En la conferencia “Rol del Pueblo, desafíos para la protección de los derechos humanos en la República Dominicana y caso Cueva de las Maravillas”

La Defensora del Pueblo, Zoila Martínez Guante, mientras dictaba la conferencia “Rol del Pueblo, desafíos para la protección de los derechos humanos en la República Dominicana y caso Cueva de las Maravillas”. (Diario Libre/ Martín Castro )

La Defensora del Pueblo, Zoila Martínez Guante dijo que “mientras viva no voy a permitir que un grupo de diez dominicanos millonarios, se aprovechen de su relación con políticos y funcionarios públicos para quedarse como propietarios de un monumento natural, arqueológico y cultural, único en las Antillas”, como es el caso Cueva de las Maravillas.

“Debemos respetar los derechos humanos fundamentales, tenemos que romper la apatía, tenemos que hablar cuando se violen nuestros derechos, todos somos iguales. Estamos defendiendo con demencia la Cueva de Las Maravillas, porque es del pueblo y es una reserva antropológica, es un parque nacional. La Constitución la tenemos que cumplir todos”, agregó la defensora.

Consideró injusto que el Estado “regale” a la Fundación Cueva de las Maravillas, un total de 10,401,518.39 metros cuadrados de terreno que incluye las cuevas, ubicada en el municipio Ramón Santana entre las provincias San Pedro de Macorís y La Romana.

Zoila Martínez Guante se refirió al tema en la conferencia “Rol del Pueblo, desafíos para la protección de los derechos humanos en la República Dominicana y caso Cuevas de las Maravillas”, en la Universidad Autónoma de Santo Domingo (UASD).

Resaltó que “un verdadero defensor nace con marcada vocación de servicio, pasión, y más que nada entrega a la defensa de los oprimidos y –o excluidos, teniendo presente que pueblo somos todos. A lo largo de la historia, en el mundo han existido militares y millares de hombres y mujeres que ofrecieron sus vidas para que prevaleciera el respeto a los derechos humanos, los que siglos después se consagraron en la Declaración Universal de los Derechos Humanos”.