Madre de “Esperancita” exige justicia ante Comisión Interamericana de Derechos Humanos
SANTO DOMINGO. En el quinto aniversario de la muerte de Rosaura Almonte Hernández (conocida como Esperancita) y a cuatro años de haber iniciado varios procesos legales que continúan sin avanzar, su madre, Rosa Hernández, anunció que acudió a la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) buscando que sean esclarecidas las condiciones en las que falleció su hija y se establezcan las sanciones correspondientes.
Rosaura Almonte Hernández fue hospitalizada de urgencias en julio de 2012 en un centro de salud público y le detectaron una leucemia aguda y aunque necesitaba quimioterapia para luchar por su vida, no se la iniciaron a tiempo porque estaba embarazada.
Después de mes y medio de estar hospitalizada, falleció el 17 de agosto de 2012 sin que hasta la fecha exista una respuesta judicial efectiva por lo sucedido.
“Tuve que dirigirme a la justicia internacional por la muerte de mi hija porque aquí no han hecho nada, y porque a la justicia de mi país no le interesa saber qué hicieron los médicos mal o qué no hicieron para que casos como este no vuelvan a repetirse”, declaró Hernández.
En la petición, Rosa, maestra de una escuela primaria, reclama al Estado por las fallas tanto del sistema de salud que no le brindó atención adecuada ni oportuna a su hija Rosaura, como del sistema de justicia que no ha avanzado en la investigación del caso y que incluso le niega a Rosa su derecho a acceder al expediente judicial.
Una oportunidad
Rosa y sus representantes de Women’s Link Worldwide y la Colectiva Mujer y Salud han dicho que el proceso es una oportunidad para que el Estado dominicano reconozca las fallas de los sistemas de salud y de justicia en el caso de Rosaura, e implemente medidas para que historias como esta no se repitan en el país.
“Ninguna mujer debe morir o estar en riesgo en República Dominicana por causas asociadas con el embarazo”, afirmaron durante el encuentro.
Se reclama investigar, juzgar y eventualmente sancionar las violaciones de derechos humanos como las sufridas por Rosaura, a iniciativa del Ministerio Público y no a partir de las reclamaciones de las víctimas, sus familiares o terceros.
Además, pide que se cree una unidad especializada en mal praxis médica, para garantizar que en el sistema de justicia existan operadores con el conocimiento técnico y las herramientas necesarias para llevar a cabo una investigación diligente.
También que se garantice que todas las instituciones de salud brinden información precisa y sencilla sobre la condición de salud de las pacientes, sobre los exámenes diagnósticos y procedimientos médicos necesarios y sobre las expectativas del tratamiento, entre otros.
Asimismo, que se apliquen de forma efectiva protocolos de traslado y ubicación en centros especializados según la necesidad médica.
Además, demanda la construcción de un club de estudios y recreación para niñas, niños y adolescentes, en el sector de Pedro Brand, con el nombre de Rosaura Almonte, para honrar y perdurar la memoria de la adolescente.