Miguel Vargas rechaza la sentencia de la CIDH; dice que la soberanía no se negocia

SANTO DOMINGO. El presidente del Partido Revolucionario Dominicano (PRD), Miguel Vargas Maldonado, afirmó ayer que ningún país, ni organismo internacional, ni tampoco ninguna Corte, tiene derecho a trazar pautas sobre la Constitución y las leyes dominicanas en materia de migración y el régimen de extranjería.

En un documento en el que fija posición sobre la sentencia de la Corte Interamericana de los Derechos Humanos, Vargas asegura que ha sido más que obvio y evidente las presiones internacionales sobre la República Dominicana, ante el tema de la migración extranjera. Afirma que la sentencia de la CIDH no tiene efecto jurídico, ni es vinculante, porque el Congreso Nacional nunca ha conocido el Convenio firmado por el ex presidente Leonel Fernández para que el país sea signatario de la jurisdicción internacional, como ordena el artículo 93 de la Constitución.

Plantea que esta sentencia debe servir de oportunidad para que las autoridades del Gobierno asuman con mayor dignidad, responsabilidad, firmeza y gallardía, la defensa de la soberanía, y se le recuerde a la comunidad internacional y a todo el mundo que la República Dominicana ha sido el país más solidario y colaborador con los vecinos haitianos, pero que no puede ser la única en ayudar con los problemas económicos y sociales de Haití. “Los dominicanos no podemos seguir cargando solos con el peso de sus problemas y mucho menos a expensas del respeto a nuestra soberanía”, dijo Vargas.