El Aedes vittatus: especie exótica de mosquito y potencialmente invasora

“El mosquito Aedes vittatus es un claro ejemplo de especie exótica potencialmente invasora y, como tal, las medidas a adoptar deben ser firmes, lo más rápidas y coordinadas posibles, siempre basadas en la evidencia científica”, planteó este miércoles Pedro M. Alarcón-Elbal, experto en enfermedades transmitidas por vectores

Alarcón-Elbal, profesor y parte del equipo de Medicina Tropical y Salud Global en la Universidad Iberoamericana (Unibe) que registró el hallazgo del Aedes vittatus en el país, señaló que el objetivo final debería ser, la erradicación de esa especie, aunque dijo que por experiencias anteriores, esto suele ser una meta de muy difícil consecución, pero no imposible.

“La gente debe saber que nada de esto se logrará mandando a camiones para realizar fumigaciones intensivas. Esto sería un gran error”, señaló a Diario Libre.

Alarcón-Elbal precisó que lo primero que se debe saber es la verdadera distribución que tiene esta especie no solo en Jarabacoa, sino en toda República Dominicana. Esto los llevaría a profundizar acerca de diferentes aspectos de su biología, como conocer cuándo aparece o qué hábitats larvarios prefiere colonizar en el país.

“Es imposible luchar contra algo que se desconoce, sin embargo, contamos con información valiosa en la literatura científica: Aedes vittatus vive tanto en sitios silvestres como en entornos domésticos, aunque habitualmente ligada al entorno rural, aspecto que lo diferencia de Aedes aegypti, por lo que estaría ocupando un nicho diferente”, dijo.

Alarcón-Elbal explicó que considera que el problema de las enfermedades tropicales en general, y de los mosquitos vectores en particular, ha estado subestimado en el país en las últimas décadas.

“Hay una gran escasez de profesionales que nos dediquemos a esta disciplina, seguramente por el enfoque cortoplacista que se tiene en muchos ámbitos, también en el sanitario, que ha propiciado que no se apueste por invertir en la prevención”, aseveró.

El hallazgo

Acerca de las circunstancias del hallazgo, Alarcón-Elbal detalló que junto a su colega, María Altagracia Rodríguez Sosa, se encontraban realizando una inspección rutinaria de sitios de cría de mosquitos domésticos cuando advirtieron la presencia de unas hembras que trataban de picarles insistentemente en las piernas.

“Capturamos algunos individuos y después los observamos con el estereomicroscopio, momento en el cual, y tras la incertidumbre inicial, descubrimos que se trataba de esta especie”, dijo.