Trabajadoras sexuales se capacitarán varios oficios
Infotep y Copresida darán cursos gratis a 202 de ellas en diferentes áreas técnicas
SANTO DOMINGO. El Instituto Nacional de Formación Técnico Profesional (Infotep) y el Consejo Presidencial del Sida (Copresida) lanzaron ayer un proyecto para capacitar a 150 trabajadoras sexuales y 52 transexuales en diferentes oficios como tapicería, repostería, diseño de uñas, adaptación de cabellos y bartender.
Algunas de las beneficiadas aspiran a dedicarse a trabajar en el área que elijan, sin dejar su trabajo primario. Otras quieren emplearse de lleno y ganarse el dinero lejos del sexo por paga y las calles.
Shakira Reyes, un joven esbelto, con una larga cabellera adaptada, y un cuidado maquillaje, es un transexual con 27 años de edad y siete siendo trabajador sexual. "Gracias al Infotep y Copresida a nosotras nos están dando oportunidades sociales en el país porque anteriormente no nos dejaban estudiar en centros así. Ahora me va a permitir realizar mi imagen como una mujer bien puesta, sin tener discriminación", dice.
Le gusta la decoración, los accesorios y la tapicería. Piensa trabajar en esta última para conseguir más dinero, ya que, aunque no es trabajadora sexual de lleno, hace sus salidas "de vez en cuando". "Cuando me prepare, dejaré de hacer mi trabajo sexual", asegura.
La iniciativa de los cursos surge a raíz de la prevalencia del VIH y Sida en las trabajadoras sexuales que, según informó el director del Copresida, Gustavo Rojas, ronda en 4.8. Para el proyecto, la institución destinó RD$996,098.
Aneudys Polanco o "Paloma Sody" (como prefiere que la llamen) es estudiante de término de Bioanálisis en la Universidad Autónoma de Santo Domingo (UASD). Se inscribió en los cursos de tapicería y decoración de interiores. "Voy a tratar de ejercerlo los dos, porque uno tiene un simnúmero de conocimientos y, si tengo que dejar el trabajo sexual, con mucho gusto lo hago", dijo el joven de 28 años, quien desde los 14 años sintió inclinación por los de su mismo sexo. Ya tiene ocho años como trabajador sexual.
"Hay muchas transexuales, ¿tú sabes por qué? Se han ido incrementando porque esta comunidad es una de las más vulnerables y no nos dan empleo en ningún sitio. Hay muchas de ellas que las botan de sus casas. Por eso son una de las más vulnerables que hay", dice Rafael del Orbe o Thalía Almendarez (como la conocen), quien coordina el grupo Trans Siempre Amigos (Transsa) que tiene 600 miembros en el país.
Otros cursos en que se capacitarán gratuitamente las participantes son: preparación de bocadillos, camarero de habitación, manejador de paquetes de oficina, decoración de interiores, velas, velones y joyería. Como las estudiantes serán, además de Santo Domingo, de San Pedro, San Francisco de Macorís, La Romana e Higüey, se les facilitará el transporte.
Las mujeres
Las féminas que se dedican a la prostitución también están optimistas.
Con timidez, una de ellas que pidió reserva de su nombre, estudiará adaptación de pelo y diseño de uñas. Al terminar, piensa dedicarse nada más a eso. Antes trabajaba como empleada doméstica y ya tiene unos cincos años como trabajadora sexual. "Uno sabe que no es bueno (la prostitución) pero uno lo hace por necesidad", dice.
El negocio
"Ahora mismo hay como siete tipos de trabajos sexuales, por ejemplo, los 'car wash', las casas de citas, los bares, los billares, los bingos", explica Carmen Lorenzo. "Todo el que ejerce el sexo a cambio de algo yo lo catalogo como trabajador sexual", agrega.
El costo de los servicios varía. En la calle se pueden conseguir hasta en RD$200 y en las casas de citas (las más caras) unos RD$2,000. "Si es un "con todo" hay clientes que han pagado por un servicio hasta RD$10,000, depende cómo el cliente decida", explica el transexual Thalía Almendarez. En las calles, las trabajadoras se ubican en las avenidas Ortega y Gassett y San Vicente de Paul, en la "bolita del mundo" y el kilómetro nueve.