El porcentaje de éxito en prospectos de RD abrió los talonarios de Grandes Ligas

Los tropiezos del principio se reducen y sube porcentaje El 33% de bonos millonarios 1997-2013 llegó a la MLB

Los Atléticos hicieron una apuesta agresiva con US$5 millones en Robert Puasón.

Hace tres décadas, los US$350,000 que logró de bono como primera selección del draft el lanzador de los Orioles Ben McDonald era el tope. Pero en 1990 el agente Scott Boras convenció a los Atléticos de que un aficionado costaba siete dígitos y lo logró con Todd Van Poppel (US$1,2 millones).

Apenas seis años después el poco grato para los equipos, Boras, persuadió a los Yankees de que un latino también podía saltar el umbral y los Mulos dieron US$1,6 millones al jardinero venezolano Jackson Melián en 1996.

El fenómeno llegó a República Dominicana en 1997 con Josephan Bernhardt (US$1,100,000 con los Blue Jays), pero una década después se pluralizó.

Van Poppel fue un lanzador de -0.4 WAR en 11 años en el Big Show, Melián navegó hasta AAA y Bernhardt no superó A+, pero sus fichajes cambiaron para siempre el chip a los equipos sobre el valor del talento en una edad temprana donde acertar es más difícil que batear las rectas de dos costuras de Max Scherzer.

Desde Bernhardt hasta 2018 los equipos de las Grandes Ligas apostaron US$216,389,050 para reclutar a 114 prospectos dominicanos que recibieron bonos de al menos un millón. Una lista que puede sumar otros 16 si las rúbricas del martes se materializan en los próximos 90 días.

Si bien en la primera el grupo quedó a deber en función de las expectativas (Ricardo Aramboles, Wily Mo Peña, Willy Aybar, Joel Guzmán, Ángel Villalona, Fernando Martínez) la promoción siguiente con tiempo para estar en la MLB (2008-2013) presenta resultados halagüeños.

Licenciado en Comunicación Social egresado de la universidad O&M. Ejerce como periodista especializado en deportes desde 2001.