Jair Jurrjens, el lanzador que abrió las puertas de Curazao a la MLB
Es producto de la generación de oro de béisbol con matrícula holandesa
SANTO DOMINGO. Si el Reino de los Países Bajos ha llegado como serio candidato a las últimas dos ediciones del Clásico Mundial de Béisbol ha sido gracias a la abundancia de talento de calibre MLB incubado en sus factorías caribeñas, una mina que abrió el domínico-curazoleño Henlsey Meulens (1989) y que luego ha sacado material premium como Andruw Jones, Andrelton Simmons, Jonathan Schoop, Kenley Jansen y Xander Bogaerts.
El curazoleño Jair Francoise Jurrjens fue el primer lanzador del archipiélago antillano holandés, que también integran Aruba y Bonaire, en aterrizar en el Big Show (2007) y estuvo hasta 2014.
Desde entonces ha tratado de regresar, con una pequeña experiencia en China (2016) y en marzo pasado los Dodgers lo ficharon, pero en junio se encontró exceso de testosterona en su sangre y purgó una suspensión de 80 partidos.
La generación de oro que ha sacado su país la atribuye al trabajo en las bases de entrenadores y cree que si logran mantener el “hambre” se puede mantener.
“Ahora los muchachos se preparan más temprano como aquí, muchos van a las escuelas en los Estados Unidos, como los mayores ven que hay futuro en pelota están comenzando desde chiquito, hay entrenadores profesionales que les enseñan cómo trabajar desde chamaquito”, dijo Jurrjens, miembro del equipo holandés en 2006 y 2016.
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Es el récord que acumuló en las Grandes Ligas entre Detroit, Atlanta, Baltimore, Cincinnati y Colorado.