La renovación de Manny Acta sigue en el aire, lo que disgusta al gerente

Manny Acta es el único ejecutivo que ha gerenteado a Águilas y Licey.

El impasse que mantiene dividido en dos grupos a accionistas y directivos de Águilas Cibaeñas no ha hecho mella en los resultados del equipo en el terreno, pero estaría afectando la continuidad más del torneo de un activo importante en la mejora que ha presentado en club en los últimos tres años: Manny Acta.

El principal ejecutivo de operaciones de béisbol amarillo estaría molesto por la dilación en la renovación del contrato que expira en febrero y cuyo anuncio de extensión el mes pasado no ha sido aprobado por una junta directiva en la que no hay consenso sobre el tema.

Fuentes cercanas al equipo dijeron a DL que la renovación del petromacorisano estaría en el limbo al punto que entre directivos la condicionan a que retenga la corona.

Las diferencias comenzaron la temporada pasada en torno a incomodidades que Acta sentía para trabajar, incluyendo el pedido del cese del dirigente Lino Rivera en el round robin, lo que el ejecutivo había rechazado. Su esperanza estaba depositada en que un cambio en la presidencia facilitaría las cosas, pero la llegada de Adriano Valdez Russo no resultó en lo que esperaba, ya que este en la actualidad no tiene control de la junta, producto de las diferencias entre directivos.

Acta, que cuenta con el apoyo del grupo que representa Juanchy Sánchez, no estaría trabajando contento. El actual coach de banca de los Marineros interesa a las Estrellas Orientales, pero su pacto con las Águilas de momento lo saca de gerentear en su provincia nativa.

Acta, que en sus primeros dos años ha llevado al equipo al título y subcampeonato, ha tenido que tomar decisiones impopulares como el despido de Félix Fermín y la salida de Luis Polonia.