Mariano Rivera:“Nunca me di por vencido, siempre mi fe estuvo fuerte”

En 1992 Mariano Rivera fue sometido a la operación Tommy John, tres años después comenzaría la carrera en las Grandes Ligas del que sería el mejor cerrador de todos los tiempos.

“Nunca me di por vencido, siempre mi fe estuvo fuerte y sabía que iba a regresar, no sabía que iba a estar a este nivel o mejor”, expresó Rivera, quien fue escogido de manera unánime para el Salón de la Fama de Cooperstown el pasado mes de enero.

El panameño resalta que Dios juega un papel en su vida y en su carrera: “Si el Señor no está en lo que hago no quisiera existir, de esa manera es la magnitud de la fe que tengo. Dios me abrió las puertas y me mantuvo hasta el día de hoy, no siento que soy mejor que nadie, ni peor”.

El canalero es líder de todos los tiempos en salvados en la MLB con 652 , todos con el uniforme de los Yanquis de Nueva York. Consiguió cinco anillos de la Serie Mundial. En 1999 fue escogido como Jugador Más Valioso y asistió 13 veces al Juego de Estrellas.

Recibió todos los votos para ingresar en su primer año de elegibilidad, algo que ninguno de los inmortales ha conseguido.

Confiesa que no esperaba la unanimidad: “Esperaba un 99.8, cuando se dio la noticia de que había sido cien por ciento ¡wao! fue algo especial, fue una bendición”.

Sobre cuál fue el jugador dominicano más difícil que le tocó enfrentar durante su trayectoria en la gran carpa, el excerrador dice que todos han sido complejos y a todos les tiene un respeto único.

“Está David Ortiz, Manny Ramírez, Vladimir Guerrero. Me he enfrentado a cantidad de peloteros dominicanos y para mí todos son buenos”, dijo el nacido en Puerto Caimito en 1969.

Acerca de qué le faltaría a Panamá para crecer como República Dominicana en el béisbol de las Grandes Ligas, el veterano de 49 años opina que su país se ha enfocado en otras disciplinas como el baloncesto, deportes de campo y pista, boxeo y fútbol.

“El dominicano ama la pelota como el arroz y el mangú. Tenemos mucho talento también, pero no hemos sabido explotarlo. No hemos tenido el apoyo. Me gustaría tener ese apoyo del Gobierno y también de empresas privadas para poder explotar ese talento que hay en Panamá”, dice.

¿Qué sigue después del béisbol?

Después de su retiro, Mariano tiene la idea de crear un centro de aprendizaje en la ciudad de Nueva York. “Hay mucha necesidad en esa área y voy a aprovechar para levantar fondos y construir ese centro comunitario, si Dios me lo permite sería el primero de muchos”, puntualiza.

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