Lionel Messi, un rey sin corona y con la espina clavada

El delantero Lionel Messi espera por una corona con su natal Argentina, luego de éxitos en Europa. (EFE/Juan Carlos Cárdenas)

BUENOS AIRES, Argentina. Lionel Messi, aclamado como figura y bañado en oro en el FC Barcelona, lleva clavada la espina de no haberse consagrado con la selección mayor de Argentina, una cuenta que sueña cerrar en junio en la Copa América Centenario.

“Ganamos muchísimas cosas, más de lo que uno pensaba cuando arrancaba en el fútbol. Quizá todavía está la ‘espinita’ de la selección, que jugamos algunas finales y no concretamos ninguna”, admitió el astro argentino semanas atrás.

Esa cuenta pendiente pesa más en un balance cargado de glorias personales y de títulos con el club catalán.

Pero nada parece llenar el vacío para este jugador cuyo amor por el equipo de su país llegó incluso a ponerse en duda entre la pasional hinchada argentina.

“Cambiaría todos mis balones de oro por ganar un Mundial”, admitió Messi dueño de cinco de los trofeos FIFA que premian al mejor futbolista del mundo.

A los 28 años, en lo personal, ya no le quedan premios por ganar ni récords por alcanzar.

Con el FC Barcelona ganó 8 ligas de España, 6 Supercopas, 4 Liga de Campeones, 4 Copas del Rey, 3 Supercopas de Europa y 3 Mundiales de Clubes. A estos títulos se suman los dos que consiguió con la casaca argentina.

Pero ‘Lío’ quiere más y espera conseguirlo en Estados Unidos adonde Argentina jugará en el grupo D, con el campeón Chile, Bolivia y Panamá como rivales en los papeles más débiles.

“Intentaremos aprovechar la oportunidad. Sería muy importante para Argentina lograr la Copa. Merecemos ser campeones de una copa importante”, dijo.

Padre de dos niños, Thiago de 3 años y Mateo, de 7 meses, Messi cumplirá 29 años el 24 de junio en plena Copa, dos días antes de la final.

Después de varias finales con frustraciones ésta puede ser la vencida. Además de la derrota ante Chile el año pasado, Messi también perdió en la final la Copa del Mundo ante Alemania en Brasil-2014 y, además el partido decisivo, la Copa América frente a Brasil en Venezuela-2007.

Los jugadores de la selección argentina “merecemos ser campeones de una copa importante”, dice. Llegó la hora de una nueva oportunidad.