Tufo a formol en el Quisqueya

Randall Delgado

“Aunque te quiebre la vida, aunque te muerda un dolor, no esperes nunca una ayuda, ni una mano, ni un favor...”. Enrique Santos

 Los Tigres del Licey ocupan la quinta posición del standing, y los Leones del Escogido el sótano, un mensaje claro de humo negro de que ambos equipos tienen los pies de plomo que les impiden cabalgar a todo galope hacia una de las posiciones del dinero.

Como home club tienen récord combinado de 6-13, y para que los fans lo entiendan, y vayan preparando el velatorio, se siente el tufo a formol, porque la muerte es lenta, pero segura. ¡Oh... dolor!

¿Se repetirá la historia de 1975? En ese torneo, al Quisqueya de ambos lados le bajaron el “Cutao”.

¿Qué le ha fallado al Licey? Pitcheo. Sobre todo relevo intermedio y final. Y cuando dos pitchers abridores están dominantes, sucede lo del sábado, que Ascher Wojciechowski no pudo salir en el tercero ante los Toros por la lluvia, y el domingo, Randall Delgado a quien en 4.0 IP, 1 HP, 8 K, lo sustituyen por tener 91 pitcheos. Al relevo le toca poner el orden.

La ofensiva añil ha pisado la goma 81 veces, y la oposición le ha fabricado 91 carreras, con una efectividad colectiva de 4.41. Preocupante es que en 157 episodios, no incluye el juego de anoche, le han conectado a los pitchers 156 hits, y han concedido 51 transferencias. Y para postre, le han conectado 20 jonrones, reyes en ese departamento, y por igual líderes en errores con 21.

¿Y los Leones del Escogido?

Igualmente el mediocre pitcheo. Presentan la peor efectividad del torneo, con 5.69. En 167.2 entradas le han castigado los lanzadores con 197 hits, y han concedido 93 bases por bolas.

El cuerpo monticular de los melenudos es el único que supera las 100 carreras limpias permitidas con un total de 106. Y para ponerle la tapa al frasco, son los peores en bateo colectivo, con .258, fruto de 169 hits en 651 turnos.

Con los palmarés que exhibe el pitcheo y la ofensiva escarlata, no hay pollo que llegue a gallo.

El 17 de enero de 1975, la Capital estaba de luto, cuando el lanzador Jackie Brown, de las Águilas, lanzó una blanqueada 3-0 sobre el Licey, logrando el pase a la serie final, la cual disputaron con las Estrellas Orientales, siendo la primera vez que el Distrito se quedó sin play off final.

Desde que en 1989-90 se instituyó el sistema de Todos Contra Todos a la distancia de 18 juegos, sólo en tres ocasiones un equipo de la Capital ha estado ausente. El panorama pinta hoy que podrían ser los dos inquilinos del Quisqueya. La primera vez fue en 1992-93 entre las Águilas y los Toros en 1994-95 de nuevo Águilas y Azucareros, y la última vez en 1999-00 donde se midieron las Estrellas y las Águilas.

Twitter: @bienvenidorv