Examen semestral

Por Alejandro Fernández W.Analista financieroCerró el primer semestre del año y ya tenemos números detallados en cuanto al desempeño crediticio del sector financiero dominicano. En términos generales, las noticias son positivas.Todos los tipos de préstamos aumentaron en el transcurso del primer semestre, al comparar las cifras a junio de 2018 con el cierre de diciembre de 2017.Excluido de nuestro análisis el crédito público, se mantuvo durante este periodo inicial de 2018 un cierto auge del crédito comercial privado, es decir, los préstamos otorgados a empresas.Vemos en la primera gráfica que el crédito a empresas subió RD$27.5 mil millones, superior al incremento de RD$17.8 mil millones que registraron los préstamos a personas durante el semestre.En términos relativos a dónde estaban al cierre de 2017, el crédito comercial aumentó 5.5%, el de consumo, que incluye vehículos y tarjetas de crédito, un 3.9%, mientras que los préstamos hipotecarios subieron en torno al 4.5%.De los préstamos a personas, se destaca el casi inexistente crecimiento de los préstamos para la adquisición de vehículos, que apenas aumentaron RD$58 millones o el 0.1% durante estos seis meses.La cifra sorprende, sobre todo tomando en cuenta que en cualquiera de las “auto-ferias” una sola entidad financiera es capaz de desembolsar varios miles de millones adicionales de ese tipo de crédito.Los saldos en tarjetas también muestran un muy tímido crecimiento de 1.7% (¡y qué bueno que es así, tomando en cuenta que ese financiamiento le cuesta al usuario por encima del 50% anual), El relevo del crédito plástico ahora es el crédito diferido, también vinculado a las tarjetas, que aumentó 5.6% o RD$1,375 millones versus RD$867 millones de saldos por consumos con plásticos.Los jugadores principalesIgual que en el primer cuatrimestre, Popular sigue marcando la diferencia en cuanto a la dinámica crediticia de la banca dominicana. Algo extraordinario, tomando en cuenta que para un coloso crecer no deja de ser algo bien retador.Vemos en la segunda gráfica que el azul aumentó su cartera al sector privado RD$21.2 mil millones, mientras que los otros dos colosos (Banreservas y BHD León) solo lograron aumentos netos de RD$9.6 mil millones, menos de la mitad de lo logrado por el Popular Dominicano.El Reservas tuvo una contracción en su cartera comercial (específicamente en sus préstamos al sector construcción, como veremos), pero fue más que compensado por su notable desempeño en el crédito al consumo, que fue el mayor de todas las entidades financieras. Del Top 20 de Argentarium, 17 de las entidades financieras dominicanas aumentaron sus carteras en el semestre. Se destacan, por su crecimiento crediticio en términos relativos, el Banco Caribe (13.3% en seis meses), Banesco (12.3%), el Progreso 11.9%), la Asociación Cibao (10.8%), y el Santa Cruz (10.2%).Los sectores beneficiadosEnfocándonos solamente en la cartera comercial, la industria manufacturera, el comercio y el turismo, fueron los tres principales sectores receptores del crédito bancario durante el semestre.Con la excepción del sector construcción, que parece haberse contraído en RD$4.7 mil millones durante el periodo analizado, todos los demás renglones de la economía recibieron mayor crédito a junio que el que tenían en el 2017.No está claro lo ocurrido en la caída del sector construcción, pero la reducción estuvo fuertemente vinculada a la contracción de RD$6.9 mil millones en ese tipo de cartera en el coloso público. ¿Obedecerá a una reclasificación de esa cartera del sector privado al público? Quizás.A nivel sectorial, decepciona el poco apoyo brindado al sector agropecuario. En seis meses, el crédito de la banca al campo solo aumentó RD$109 millones, un patético incremento de 0.5%.Una cartera más “dolarizada”El 40% de los nuevos préstamos en la cartera comercial fueron desembolsos en dólares, sobre todo al comercio y turismo. En la última gráfica verá que estos desembolsos en US$ jugaron un rol importantísimo en el “boom” logrado por Popular durante el primer semestre, pues alcanzaron el 77% de sus desembolsos comerciales. Evidentemente, una apuesta a la continua estabilidad cambiaria.