Aprende a leer las etiquetas de tus cosméticos con estos trucos

Te damos cuatro trucos para facilitarte la lectura de las etiquetas de tus productos de belleza

No leer el etiquetado de tus productos es un grave error. (Shutterstock)

Si al momento de comprar tus cosméticos ni siquiera te molestas en verificar los ingredientes, ¡declárate culpable!, estás cometiendo un gravísimo error. Así como sucede con las letras pequeñas que casi nadie lee en los contratos, pasa igual con tus productos de belleza, los cuales pueden prometerte ser cien por ciento naturales, ideales para todo tipo de piel y sin conservantes sintéticos, pero al final nada que ver con la realidad.

Y claro, hay que admitir que muchas veces no le prestamos atención al etiquetado porque no somos muy diestras en ese asunto, lo cual es totalmente válido. Pero ¿sabes qué? Ya no tendrás razón para vivir en la ignorancia, porque te daremos cuatro trucos para facilitarte la lectura de las etiquetas de tus cosméticos. ¡Toma nota!

Identifica el ingrediente principal. En los productos de belleza, los ingredientes se colocan de mayor a menor, esto quiere decir que en la lista los primeros componentes citados son los que se encuentran en mayor proporción, mientras que los últimos son los de menor concentración. Por lo general, el ingrediente principal es el agua, aunque debes tener presente que hay activos que no necesariamente deben encontrarse en grandes cantidades para ser efectivos, como es el caso de los aceites esenciales.

Diferencia entre sustancias químicas y derivados naturales. Establecer la diferencia entre ambos es más fácil de lo que imaginas; mientras las sustancias químicas se citan en inglés, los derivados de las plantas se colocan en latín. Es importante que sepas que el hecho de que el ingrediente esté en inglés no lo hace 100 % natural, ya que hay compuestos químicos naturales.

Huye de los conservantes sintéticos. Los conservantes tienen su razón de ser, y es que ayudan a que el producto tenga una vida útil mucho más prolongada. Sin embargo, hay algunos de los que es mejor mantenernos alejadas, como es el caso de los parabenos sintéticos, los cuales aparecen bajo nombres que acaban en –paraben, -parabeno o –parabens. El ácido benzoico y el alcohol bencílico también son conservantes sintéticos utilizados frecuentemente en la cosmética.

Conoce la fecha de conservación después de la apertura. Todos los productos de belleza tienen un periodo de vida útil, el cual viene marcado con un símbolo de envase abierto, en el que se especifica un número seguido por la letra M. Esto quiere decir que si, por ejemplo, tu crema dice ‘5 M’, su fecha de conservación después de que la abras es de cinco meses. Y aunque existe la creencia de que aun después de la fecha de caducidad tenemos tres meses para poder usarla, los expertos recomiendan no exceder el tiempo indicado, sobre todo si el producto ha estado expuesto al calor.