Conoce los factores de riesgo del cáncer bucal (el sexo oral es uno de ellos)

Quizá no sea tan conocido como las demás afecciones de su tipo, pero eso no quiere decir que sea menos relevante o dañino. Estamos hablando del cáncer bucal, el cual representa apenas cerca del 5 % de la totalidad de los cánceres humanos, pero que cada vez es más frecuente. ¿La razón?, la falta de conocimiento sobre su existencia y, por ende, de cómo prevenirla.

Los profesionales de la salud han definido el cáncer de boca como una enfermedad maligna que se desarrolla en la cavidad bucal; en otras palabras, se trata de un tipo de cáncer que afecta todas las partes de la boca, dígase los labios, la lengua, las encías, el revestimiento interno de las mejillas, el paladar y debajo de la lengua.

De acuerdo con la doctora Leira Solís, especialista en patología oral y medios diagnósticos, los factores de riesgo del cáncer de boca son el tabaquismo, el alcoholismo y la infección del virus del papiloma humano. Dicho esto, recalca que el sexo oral y referida enfermedad guardan una estrecha relación.

“Las relaciones íntimas, sobre todo el sexo oral, han aumento la incidencia de cáncer de orofaringe por el aumento de casos del virus del papiloma humano. Esta infección produce lesiones benignas y también malignas, no solo en cavidad oral sino también en el los genitales y sistema reproductivo”, comenta. A eso añade que otras causas a las que se asocia la afección son la encefalopatía traumática crónica, la baja ingesta de alimentos ricos en antioxidantes como frutas y verduras y la sobreexposición al sol, en el caso del labio.

Pese a que se presenta con mayor frecuencia a partir de los 60 años, en especial en el sexo masculino, los casos de personas jóvenes van en aumento. Esto, a causa de la desinformación sobre su prevención y diagnóstico temprano. De hecho, datos confirman que los pacientes suelen llegar a consulta médica una vez la enfermedad se encuentra en etapa avanzada.

El manejo es multidisciplinario. Si el paciente presenta las señales antes descritas, el primer paso es acudir a un odontólogo o médico general, que son quienes, por lo regular, detectan la lesión. Posteriormente, el patólogo oral debe ser quien dé el diagnóstico definitivo de la misma. Dependiendo del dictamen, se derivará al especialista ideal para cada caso.

“El manejo casi siempre está a cargo de especialistas en cirugía maxilofacial, oncología y sus subespecialidades. En ocasiones se involucran profesionales de otras ramas, como cirujanos plásticos y reconstructivos, con la finalidad de mejorar la función, estética y sobre todo la sobrevida del paciente”, dice la doctora, agregando que también se suman otros profesionales de la salud para lograr mantener la mejor calidad de vida del paciente, como nutricionistas, psicólogos, terapeutas del habla, etc.

¿Puede una persona diagnosticada con cáncer bucal llevar un estilo de vida normal? A consideración de Solís, dependerá de la etapa en la que sea identificado. “Si es detectado en estadios temprano, luego de recibir el tratamiento indicado, la respuesta es que sí puede llevar un estilo de vida normal. No obstante, conforme pasa el tiempo y se diagnostique en etapas más avanzadas, definitivamente la calidad de vida se verá significativamente afectada”.

En cuanto a los tratamientos que existen para abordarlo, cita el quirúrgico como el principal, además de la quimioterapia y la radioterapia, dependiendo del diagnóstico.

Recomendaciones para prevenirlo

-Disminuye o evita el consumo de alcohol y tabaco (en sus diferentes presentaciones).

-Utiliza protectores labiales que contengan filtro contra los rayos solares. En caso de trabajar en las calles o en zonas abiertas, cúbrete con gorras, sombreros, etc.

-Vacúnate contra el virus del papiloma humano (VPH).

-Aumenta la ingesta de frutas y verduras.

-Si ves una úlcera o llaguita que no sane en 15 días o cualquier otra alteración, acude al odontólogo, preferiblemente un especialista en patología o medicina oral.

-Realiza con frecuencia el autoexamen de cavidad oral para buscar cualquier alteración en la boca o el cuello. Así podrás detectar cualquier cambio de manera temprana.