Dr. José Ramírez: “La moderación es la clave para reducir el riesgo de cáncer de mama”

A propósito del Día Mundial contra el Cáncer de Mama, hablamos con el director del Incart sobre la incidencia de este mal en el país, los avances más relevantes y los desafíos a los que aún nos enfrentamos

Hoy, y el 19 de octubre de cada año, se conmemora el Día Mundial de la Lucha contra el Cáncer de Mama. Se trata de una fecha para crear conciencia sobre este mal, que es el tipo de cáncer más común en las mujeres y el que más muertes causa en el ámbito mundial. En el caso específico de República Dominicana, las cifras son igual de alarmantes: según el Ministerio de Salud, el 35 % de los tumores malignos diagnosticados en el país corresponden a cáncer de mama y en la mayoría de los casos la enfermedad es detectada cuando ya está muy avanzada.

A propósito de la fecha, conversamos con el doctor José Ramírez, cirujano oncólogo y director del Instituto Nacional del Cáncer Rosa Emilia Sánchez Pérez de Tavares (Incart), sobre la incidencia de este mal en el país, los avances más relevantes en cuanto a tratamientos y los desafíos a los que todavía nos enfrentamos.

Háblenos sobre estadísticas reales de cáncer de mama en República Dominicana. ¿Qué tan alarmantes son?

La realidad es que todavía no hay estadísticas reales en el país. Hay un registro nacional de tumores, que apenas comenzó a trabajar el año pasado de manos del Ministerio de Salud y la Universidad Autónoma de Santo Domingo, pero al momento no hay estadísticas nacionales de cáncer de mama ni ningún tipo de cáncer. Todo lo que hay son extracciones que se hacen de registro hospitalario e ideas, pero específicamente cuántos casos hay y cuál es la población más afectada, no se sabe.

Y en base a esas ideas, ¿cómo están las cifras en el país?

Según datos de 2019, el 70 % de las dominicanas detectadas con esta enfermedad empiezan a recibir tratamiento cuando ya está avanzada. ¿Por qué, a estas alturas, la prevención y diagnóstico del cáncer sigue siendo un desafío?

Se lo atribuiría a la falta de educación y atención primaria. Aquí hacen falta mamógrafos, personal que lea las mamografías, por ejemplo. Yo creo que el país tiene una deuda con el tema de atención primaria, porque el diagnóstico temprano de cáncer de mama tiene que ver con una exitosa gestión de atención primaria. Si eso no se garantiza, nunca vamos a poder bajar los números de ese 70 % que llega en etapa tardía. Hay pacientes que no se hacen ningún chequeo ni mamografía y si se la hacen es de mala calidad. O sea, hay una serie de cosas que influyen en que esas cifras sean tan altas. Lamentablemente por eso mueren más pacientes de cáncer de mama o tienen que gastar más dinero, porque mientras más avanzado se detecta, más gastos conlleva.

El miedo a ser diagnosticado podría considerarse una de las razones por las que no se tiende a ir al médico ante una anomalía. ¿Qué diría a una persona en esa situación?

Yo pienso que ese miedo los llevaría a sufrir más que si asumen su diagnóstico. Creo que la ciencia está para ayudar. A nadie que se le indique quimioterapia se le indica por hacerle daño; todos esos tratamientos que quizá tengan efectos secundarios están hechos para ayudar a los seres humanos. Yo le diría que los médicos estamos para ayudarlos, que no le tengan miedo a un diagnóstico, porque hay solución, y mientras más temprano sea, más esperanzador será el pronóstico.

Además de actuar a tiempo, ¿hay forma de prevenir el cáncer de mama?

No la hay. Hay algunos factores que pueden ayudar, pero mucha gente confunde eso con prevención absoluta. O sea, no hay una lista de cosas que pueda decir ‘haz esto para que no te de cáncer de mama’, aunque sí se ha comprobado que definitivamente tener estilos de vida saludables reducen las posibilidades de padecer cualquier tipo de cáncer. Eso no es un mito, ni hablar al vacío: ejercitarse dos o tres veces por semana, mantener un peso adecuado, comer lo más sano que se pueda y, sobre todo, evitar el estrés, ayuda a prevenir el cáncer. Yo resumiría todo con la palabra moderación: en la moderación está la clave para tratar de reducir las posibilidades de padecer cáncer. Yo tengo pacientes vegetarianas y atletas con cáncer de mama, por ejemplo, así que eso no garantiza nada, pero definitivamente sí ayuda.

Háblenos de cáncer de mama en hombres. ¿Qué tan frecuente es?, ¿se manifiesta de la misma manera?

Es muy poco frecuente, apenas un 1 % en el país y así mismo se ve en el mundo entero. El tema es que como los hombres no tienen un programa de detección, las estadísticas dicen que se diagnostica más tardío, porque el hombre no se está chequeando las mamas constantemente. Pero es bueno que la gente tenga claro que sí existe ese riesgo.

¿Qué recomendaría a una persona que recién haya recibido un diagnóstico de cáncer de mama?

Lo primero es buscar un especialista en el área de oncología. Estoy viendo mucho en los últimos años, y es de preocupar, algunos especialistas sin formación oncológica tratando cáncer de mama, y esta es una enfermedad en la que lo que mal comienza, usualmente termina muy mal. Así que, si usted recibió un diagnóstico o sospecha de cáncer de mama, debe buscar un especialista formado en oncología para que le dé seguimiento a su caso. Un segundo consejo sería no desesperarse, porque hay solución. La mayoría de las pacientes sobrevive a esta enfermedad.

¿Cómo puede una persona cerciorarse de que se está poniendo en manos de un especialista en oncología?

En estos tiempos, las mismas redes (sociales) dan la oportunidad a las personas de saber si está frente a un cirujano oncólogo o de alguien que no tiene formación en oncología. Hay que buscar e informarse. Yo creo que hoy en día hay muchas formas de obtener ese tipo de información. Todas las sociedades de médicos tienen sus páginas web donde están sus miembros. Eso es un minuto que todos los afectados con esta enfermedad deberían tomarse, porque, repito, estoy viendo casos mal manejados desde el principio por personas que no tienen la experiencia.

Periodista de Revista. Me apasiona escribir sobre salud mental y relaciones de pareja. De no ser periodista, sería psicóloga con un blog.