En Jean Louis David Sto. Dgo., jaque mate al diseño convencional

Su diseño de interiores, cifrado en lineamientos rectilíneos y blanquinegros, ganó la partida.

Quién diría que Jean Louis David,El rótulo del Jean Louis David se exhibe actualmente en el sector La Julia sobre un imponente local, ubicado en un terreno de aproximadamente 1,780 metros cuadrados. Desde allí, los propietarios de la franquicia en el país, se rodearon de un dream team de profesionales que diseñaron y ambientaron la infraestructura bajo la dirección de Andrés Aybar, quien a través de su compañía El Estudio también manejó el concepto, el diseño y la ejecución general de los interiorismos, así como la proyección de la fachada de Jean Louis David Santo Domingo.

En la distribución del primer nivel de la edificación, donde está ubicada la peluquería, trabajó la arquitecta Mariel Asencio; en la escalera y la distribución del segundo piso, donde está el spa, estuvieron a cargo Nicola Stocco, de Eurostone, y los arquitectos Miguel Henríquez y Eduardo Álvarez. Mientras que, de la supervisión general de la obra, tanto de la peluquería como del spa, se encargó el arquitecto Zoilo Parra; y la iluminación corrió por cuenta de Andrés Aybar, de El Estudio, conjuntamente con Rosadela Serulle, de Idaluce.


Un templo Años atrás, el edificio de dos niveles que hoy alberga a Jean Louis David Santo Domingo era un espacio residencial que, casualmente, encajó a la medida con este proyecto por su estructura contemporánea. Al igual que el interiorismo de esta peluquería y spa, la construcción es rica en volúmenes, texturas y composiciones; y juega a plenitud con las formas geométricas. En la fachada de este local, un mural del artista plástico Antonio Prats Ventós fue preservado para exhibirse, mientras un cuerpo sólido en porcelanato negro permite estar frente al gran logo del Jean Louis David y disfrutar de una fuente apostada en un lateral de este paramento exterior principal, que también se reviste de porcelanato negro y cuenta con una boca de acero inoxidable por donde el agua cae en cascada a diferentes alturas.

Una vez en el interior y tras recorrer un pequeño pasillo, que iluminado indirectamente contrasta y realza los colores blanquinegros de la franquicia, se avistan el

Para dirigirse a la peluquería hay que atravesar un pequeño puente de madera sobre un río (disecado) de piedras, y para subir al spa se accede por un escalera flotante cuya estructura está inspirada en una columna vertebral. En el ínterin, una cabina VIP espera por aquellos clientes que prefieren recibir todos los servicios de esta cadena internacional, pero en privado.

Al frente está el “laboratorio del color”, donde se preparan, se aplican y se retiran los tintes. En esta área se luce un impecable piso de porcelanato blanco y tres sillas Mademoiselle, diseñadas por Philippe Starck, que le dan el único toque de color al establecimiento.

Una vez en el área de corte y secado/

No cabe duda de que la volumetría, el simplismo, la iluminación, y los muebles y artículos firmados por prestigiosos diseñadores, fueron algunas de las piezas que los dueños y los profesionales que diseñaron y ejecutaron el proyecto Jean Louis David Santo Domingo movieron estratégicamente para darle “jaque mate” al reto de ambientar un espacio nunca antes visto en el país.