La planificación: un mundo por descubrir

Foto: Jerameel Reyes.

Al principio piensas que solo se trata de libretas y/o agendas para anotar lo que tienes que hacer porque no quieres olvidarlo. Una vez empiezas a investigar, te das cuenta de que es la herramienta ideal para llevar por buen camino un proyecto. Aunque, siendo honestos, hay mucho más por descubrir.

Es muy difícil que Rocío “pierda de vista” una asignación. Más que buena memoria, tiene una muy buena agenda o planificador que muestra con orgullo cuando alguien frente a su escritorio le menciona lo bonita que es. Allí lo anota todo: compromisos laborales, ideas, compras en el supermercado, pagos de servicios, visitas al médico... usando bolígrafos de colores que se pueden borrar, stickers para hacer más divertidos los recordatorios y resaltadores, sobre hojas que quita y pone a su antojo, sin miedo a que se le estropeen.

Si echamos un vistazo a la historia, nos damos cuenta de que lo que hace Rocío es el resultado y una herencia que ha sido característica siempre del ser humano, la de escribir: sobre las paredes rocosas de las cuevas, las hojas de la planta del papiro, el papel, incluso sobre su cuerpo, con fines muy distintos, pero uno en especial que los abarca todos: recordar y ser recordado.

Y, evidentemente, así como se han ido revolucionando las formas de escritura, también lo han hecho los utensilios sobre los que se escribe. Desde los cuadernos en blanco o con líneas hasta las agendas, que ahora tienen una estructura mucho más minuciosa y se enfocan en la realización de metas a largo y corto plazo.

Estas páginas y pegatinas llamativas son solo la fachada que cubre lo que en otros países es una profesión. Los planners, personas claves en las agencias publicitarias que con sus estrategias asertivas contribuyen a que los resultados sean positivos.

“Detrás de toda gran idea hay un gran planner”, así lo asegura Miguel Ángel Furones, presidente del Grupo Publicis, al referirse a los profesionales de la planificación, una carrera que hace poco tiempo fue “descubierta” en España y, como todavía está por perfilar, se abre camino, como el mismo Furones lo indica, en un terreno donde “ni son todos los que están, ni están todos los que son”.

No todo lo que brilla...

“Dentro del mundo de los adictos a los planificadores hay una condición psicológica que se llama filo-maníaca, que son aquellas personas que compran muchos lápices de colores, papelitos, stickers...”. Emely Muñoz explica que esta adicción, muy común y de la que asegura pocas logran librarse, puede confundir la necesidad de expresión artística con la planificación, porque la desenfoca. Muñoz deja muy claro que el éxito es que logres lo que planificaste, no que la agenda tenga muchos stickers.

Sí cree que lo visualmente atractivo es bueno para la productividad y ayuda a visualizar, pero no quiere decir que sea una condición vital para planificar. Son medios, no el fin. Así que, si no tienes dinero para comprar una de estas agendas o no te gustan, porque prefieres algo más sencillo, no sientas que no puedes planificarte. Basta una libreta en blanco y disposición para lograr tus sueños. De seguro que lo vas a lograr.

Si te vas a iniciar en la planificación

1 Alinear tus propósitos.

2 Definir qué quieres lograr.

3 Plantearte las metas.

4 Sacar tiempo para planificar, al menos una vez por semana, hasta que se convierta en un hábito.

Las ventajas de la planificación

1 Te enfocas.

2 Ayuda a elegir.

3 Sabes cuándo decir que no.

4 Sacas las ideas y le otorgas niveles de prioridad.

5 Asignas fechas concretas, quién lo hará y cómo.

—Fotos de Portada, artículos y Nathalia Medina: Jerameel Reyes —Foto de Emely Muñoz: Bayoan Freites —Agradecimientos: @tienda_chinola @memorykeepersrd @helloartrd @jumbo_rd