¿Qué le dirías a tu yo de 21 años?

Hasta el momento nadie ha viajado en el tiempo, aunque es una posibilidad abierta que mantiene en expectativa y con muchas tareas a científicos como Germain Tobar, un joven investigador de la universidad australiana de Queensland, cuya reciente teoría parece abrir la posibilidad de poderlos realizar.

Por otro lado, están las películas y series que cada vez son más atrevidas al respecto y dan esperanzas a quienes creen en este tipo de cosas.

Pero, ¿para qué viajar por el tiempo? ¿Hacia el pasado para arreglar las cosas? O ¿hacia el futuro incierto para conocer los pasos que debemos de dar para quitar los obstáculos y alcanzar los sueños? Reflexionando y teniendo en cuenta lo que nos han presentado los filmes como Dark y Si No Te hubiera Conocido (repetitiva pero reflexiva), ir para atrás agotaría la vida presente y los cambios podrían ser para peor, evitar una pérdida puede causar otra igual de frustrante y dolorosa. El sentido de la vida llega del equilibrio entre perder y ganar; la alegría y el quebrando; triunfos y fracasos ...; mientras que transportarte hacia el porvenir podría encarcelarte en momentos que no te corresponden, quedándote a vivir sin una vida. Le pasó a Jonas en Dark.

Hasta que la ciencia diga lo contrario, no se puede cambiar el rumbo de la historia, que es una realidad inalterable; intentarlo trae frustración y el estrés que algunos especialistas de la salud mental ya las consideran pandemia; principalmente entre una población joven que en medio de incertidumbres ha de elegir minuciosamente el destino que conviene a su vida, porque es la etapa más importante para hacerlo.

En este sentido es posible viajar en el tiempo, pero no con tu propia experiencia, sino con las de aquellos que han cruzado un trayecto más largo y, por tanto, una visión mayor de los riesgos y oportunidades que dan los tiempos.

La pandemia dejó comprobado que el futuro no se agarra; no es sabio apoyarse en él, no es seguro. Ella nos llama a volver a la esencia, vivir el presente que es el verdadero tesoro y una caja fuerte perfecta para depositar las energías.

Preguntamos a algunos profesionales de diversas áreas, sobre un consejo para su yo de 21 años – lo de 21 es solo por la fecha en la que estamos, pero no importa si tienes 15 o 40, de todas las opiniones siempre hay algo que coger - y sus respuestas fueron de lo más interesantes; a continuación, las revelamos:

“Le diría muchas cosas, pero las resumiré en que tome la vida más suave, que será un ser humano increíble, que se mantenga firme en sus deseos y pasiones, que todo lo que ha soñado tendrá la oportunidad de irlo viviendo poco a poco, que disfrute el proceso, que viva. Y que las puertas que se le cierren, harán que otras se abran, que no coja presión. Le diría a Carlitos que el éxito está sobrevalorado, que la sociedad mide a la gente exitosa por cosas materiales y que sinceramente el éxito es más grandioso que eso”, Carlos De Moya, diseñador de moda.

“Enfócate en tus estudios y tu trabajo, el éxito te llegará trabajando; la disciplina te dará lo que necesites para lograr todas y cada una de tus metas. Es importantísimo que te formes, la calificación es lo que tenemos en el mundo para saber tu conocimiento ... hay seres humanos que están en este mundo para protegerte, llévate de tu madre, que sabe mejor que nadie cuáles son tus habilidades y lo que te conviene ... estudia, trabaja y sobre todo déjate guiar de tus padres”, Lilliam Fondeur, ginecóloga.

“Le diría prepárate, esfuérzate, no desaproveches ninguna oportunidad de aprendizaje que se te presente. Arriésgate, lánzate, inténtalo y si te caes no importa; no pienses tanto en las opiniones de los demás o lo que va a decir la gente, sigue tus sueños y no tengas miedo”, Leslie Amell Bogaert, psicóloga escolar y terapeuta de aprendizaje.