San Valentín: conoce los 5 lenguajes del amor

Si alguna vez has sentido que, por más que lo intentes, tus seres queridos no se sienten amados, este es el punto de partida para cambiar esa historia

Cada uno tiene un lenguaje de amor primario que le habla más profundamente que todos los demás. (Shutterstock)

¿Alguna vez te has detenido a pensar en cómo das y recibes amor? Quizá tu pareja, tu hermano o tus padres buscan expresar su cariño con un abrazo, un regalo o con palabras lindas, pero tú no te sientes querido al menos que te ayuden con los quehaceres de la casa. Por otro lado, puede que tú hayas tratado de expresar tu aprecio ayudando a una amiga con sus problemas, pero puede que para ella fuera más importante que expresaras tu aprecio con tus palabras.

¿Te has preguntado porque esto ocurre con tanta frecuencia (y porque tiene el poder de ir deshaciendo nuestras relaciones poco a poco)? El doctor Gary Chapman se dio cuenta de lo mismo en sus sesiones con distintas parejas en el transcurso de muchos años y notó que cuando una persona decía, “Siento que mi cónyuge no me ama”, lo que estaba pidiendo cabía en una de cinco categorías.

La premisa es simple pero ha tenido el poder de mejorar muchas relaciones alrededor del mundo: diferentes personas con diferentes personalidades expresan el amor de maneras distintas. El autor, orador y consejero llamó a estas formas de expresar y recibir amor “Los 5 lenguajes del amor”. Cada persona tiene al menos un idioma que prefiere por encima del otro... y aquí es donde se pone interesante. Como seres queridos, es nuestro trabajo descubrirlo(s).

l. Palabras de afirmación:

Usar palabras para animar y dar vida a la otra persona. Esto aplica tanto para expresar tu cariño como para comunicarte con ella.

De estos cinco, cada uno tiene un lenguaje de amor primario que le habla más profundamente que todos los demás. Descubrir el idioma del otro y hablarlo regularmente es la mejor manera de garantizar que nuestros seres queridos se sientan justamente así: queridos profundamente.

Esto no solo aplica a las relaciones románticas, sino a todas nuestras relaciones, incluidos nuestros familiares y amigos. ¿No has identificado qué lenguaje de amor hablas y cuál es el que escuchas? Puedes hacer una prueba aquí.