Un recorrido por las diademas más extravagantes de la reina Isabel II

Hoy 21 de abril la reina de Inglaterra cumple 94 años, por lo que hemos decidido hacer un breve recorrido por algunas de sus coronas más importantes

La reina Isabel II ha lucido numerosas tiaras a lo largo de su paso por la realeza. (Gettyimages)

A lo largo de los años, la reina Isabel II de Inglaterra ha sabido mantener su peculiar y elegante estilo a la hora de vestir, el cual ha adaptado a la perfección a los diferentes tiempos. Aunque los sombreros y tocados combinados con sus atuendos son de sus piezas favoritas, no podemos dejar de lado las deslumbrantes (y costosas) tiaras que ha lucido la monarca a lo largo de su paso por la realeza.

A propósito de que hoy 21 de abril la reina de Inglaterra cumple 94 años, hemos decidido hacer un breve recorrido por algunas de sus coronas más emblemáticas y extravagantes, muchas de las cuales han formado parte de la familia real británica por más de un siglo.

Tiara kokoshnik

Es la tiara favorita de la Reina Isabel II, por lo que se le ha podido ver con ella en innumerables ocasiones especiales. Su nombre (kokoshnik) hace referencia a un tocado femenino tradicional y campesino de origen ruso que se utilizaba en la cabeza para emular un halo.

Lo que la hace especial es que esta corona, que también se transforma en collar, fue un regalo por parte de mujeres de la sociedad a la reina Alexandra de Dinamarca por motivo de su aniversario de bodas de plata con el Príncipe Eduardo VII en 1888.

Cuando Alexandra murió en 1925, la tiara pasó a manos de su nuera la reina Mary, que, al fallecer en 1953, dejaría como herencia a su nieta, la reina Isabel II.

Esta ‘sencillita’ tiara, que fue diseñada por R & S Garrard, está compuesta por 61 barras en platino y 488 diamantes pavés engastados, incluyendo un gran diamante de 3.25 quilates y 65 gramos.

La diadema del Estado

Esta tiara ha estado en la familia real desde 1821, cuando se hizo para la coronación del rey Jorge IV. Tras su muerte, la diadema pasó a la esposa del rey Guillermo IV, la reina Adelaida, quien impuso la tradición de que las monarcas usaran esta pieza.

La diadema finalmente llegó a manos de Isabel II, quien la usó en el camino a su coronación en la Abadía de Westminster en junio de 1953, y, todavía al día de hoy, continúa usándola en su camino hacia y desde cada apertura estatal del Parlamento.

Está hecha con más de 1,000 diamantes, incluido uno de color amarillo de 4 quilates en el centro, y aproximadamente 170 perlas.

Tiara 'Chicas de Gran Bretaña e Irlanda'

Fue un regalo de bodas de las 'Chicas de Gran Bretaña e Irlanda' a la reina María por motivo de su boda, en el año 1898. Posteriormente, la reina María le dio la tiara a su nieta, la entonces princesa Isabel, como regalo de bodas en 1947.

Aunque Isabel II no usó la tiara el día de su boda, se le ha visto usándola durante su reinado e incluso en algunos billetes de banco británicos y de la Commonwealth.

Diadema rubí birmano

Otra de las coronas recibida por la reina Isabel II como regalo de bodas, fue esta de Cartier hecha en 1930. Esta incluye diamantes y 96 rubíes que también fueron un regalo de matrimonio para la reina.

Detrás de las joyas de la corona hay una historia, pues la razón de las 96 joyas carmín es que el pueblo de Barman quería proteger a la reina de Inglaterra de las 96 enfermedades que consideraban más peligrosas. Asimismo, las flores que se ven en la corona representan el heraldo de las rosas que representaban a los Tudor.

Tiara brasileña de aguamarina

Luego de que la reina recibiera un collar y aretes de aguamarina de parte de Brasil en 1953 para celebrar el inicio de su reinado, esta quedó tan encantada con estas piedras preciosas que decidió mandarse a hacer a la casa Garrard todo un kit a juego con sus accesorios, en el cual se incluye esta corona.