Vincent D’Onofrio dirige un western sin piedad

Siguiendo los pasos de Ben Affleck, George Clooney, Ralph Fiennes o incluso los de Robert Redford y Clint Eastwood, Vincent D’Onofrio también forma parte de la lista de actores que ahora dirigen sus propias producciones de cine. En el 2010 ya había dirigido el desconocido musical de terror “Don’t Go In The Woods”, pero esta vez contrató a protagonistas más famosos como Chris Pratt y Ethan Hawke para filmar juntos una nueva historia de vaqueros sobre el legendario Billy The Kid.

Con Chris Pratt y Ethan Hawk ya habían filmado juntos la última versión del clásico “Los Siete Magníficos” con Denzel Washington. ¿Fue por esa misma producción que quisiste dirigir tu propia historia de vaqueros?
Podría decir que sí. Yo siempre quise filmar un western. La verdad es que yo había escrito un guion de ese estilo un par de años atrás y nunca despegó porque se quedó enredado en el reino de los abogados. Pero últimamente me puse a pensar bastante sobre mi vida y mi juventud, sobre la clase de gente que tuvo cierta influencia en mi vida y algunos no siempre fueron los mejores ejemplos. En especial los hombres, porque con las mujeres siempre fue clara la influencia que tuvieron, pero con los hombres siempre me lo cuestioné. Tuve la suerte de tener un padrastro que me sacó de la calle, cuando había mucha gente que me parecía ‘cool’, por ser tan libres viviendo al borde de la ley. La verdad es que al final estaban siguiendo un camino autodestructivo mientras arruinaban la vida de otros y poco después me di cuenta que no eran tan libres como pensaba porque estaban encerrados en su propia jaula, sin poder escaparse del pasado que habían generado. Por eso se me ocurrió utilizar ese estilo de historia y transportarla a una época del lejano Oeste, donde los delincuentes creían que eran muy libres, pero no se daban cuenta de las vidas que también destruían al pasar.

¿“The Kid” es tu primer largometraje como director?
Sí.

Habiendo trabajado tantos años como actor en Hollywood, ¿en cierta forma tuviste las mejores lecciones de dirección de cine con Stanley Kubrick o Tim Burton?
Eso es exactamente lo que siento. Nunca me di cuenta de todo lo que había aprendido en todos estos años, hasta que me puse los zapatos de director. De repente me di cuenta de lo que me habían enseñado estas personas. Apenas tuvimos 20 días de filmación, pero tuve muchísima energía porque mi mente también estuvo al mejor nivel. Fue una sorpresa tremenda darme cuenta de que realmente sabía cómo filmar una película. Siempre pensé que podía hacerlo, pero es algo que nunca se sabe hasta que llega la hora de hacerlo. Y en ese momento me di cuenta de lo que había aprendido no solo de los grandes directores con los que había trabajado, también de los guionistas, los productores, los diseñadores de vestuario, todos los increíbles artistas con los que había colaborado. Es asombroso saber que estuve rodeado de tan buenas personas sin haberme dado cuenta de todo lo que ellos me enseñaron.

En el momento en que se te ocurrió mezclar ficción con la realidad de Billy The Kid, ¿también te imaginabas a tus amigos Ethan Hawke o Chris Pratt en los personajes que interpretan?
Yo siempre quise que Ethan Hawke fuera el sheriff Pat Garrett. No podía imaginar a nadie mejor. A Chris hacía tiempo que le había dicho que debería interpretar un villano, por eso le envié el guion y le encantó. Lo difícil fue encontrar a Billy The Kid, no solo como actor, tenía que encontrar a alguien que pudiera ser único, además de que encajara con mi forma de dirigir; y cuando conocí a Dane DeHaan, justo había tenido un bebé. Hablamos por Skype y tuvimos una conversación muy animada con la esposa y el bebé al lado, al punto de que pensé que no solo era talentoso como actor, sino un buen ser humano, como Ethan (Hawke) y Chris (Pratt). Me pareció perfecto.

Chris Pratt está irreconocible con la barba, que incluso se parece a la de tu personaje en “Los Siete Magníficos”.
Sí, esta vez intercambiamos barbas (risas).

¿A quién se le ocurrió la idea?
Es algo que siempre imaginé para su personaje. En mi mente, incluso, nunca veía a Chris de frente, solo de espaldas o con un saco, sombrero y barba, escondiendo su rostro, con cierta energía negativa a través de toda la historia. En la primera escena se le ve muy poco porque yo quería mostrarlo como una fuerza negativa natural, en vez de verlo de repente y digas “Ay, es Chris Pratt”. Es algo que definitivamente quería intentar. Incluso me hubiese gustado mostrarlo mucho menos en las primeras escenas, pero no pude.

La película “The Kid” cuenta la verdadera historia de cómo Billy The Kid se encuentra con el sheriff Pat Garrett. Por supuesto, D’Onofrio también tiene un rol como el sheriff Romero, mientras Chris Pratt personifica al villano Grant Cutler que secuestra a la joven Sara, que en la realidad es nada menos que Leila George D’Onofrio, la hija de Vincent.

¿Tu hija Leila George tuvo que pasar por alguna prueba de audición para el rol de la mujer secuestrada?
No.

¿Dónde termina el orgullo de ser padre y dónde empieza el rol como director?
Ella es actriz por mérito propio. Terminó de filmar con Peter Jackson y está trabajando en “The Animal’s Kingdom’s” en el rol de Ellen Barkin cuando era joven. Leila es muy buena actriz, nos hizo pasar vergüenza a todos los hombres. Hubo días en que llegaba al estudio y le daba vuelta a todo. Realmente, mi hija es muy buena como actriz y estoy orgulloso de decirlo.

¿Y el joven actor Jake Schur? Es toda una revelación en el personaje de Río.
Es la primera vez que actúa. Cuando conocí a Jake tenía 11 años y ya leía Bukowski. Recién había visto “My Left Foot” porque su actor favorito es Daniel Day Lewis. Me pareció algo bastante interesante y cada vez que pensaba en el rol del jovencito imaginaba a Jake. Solo necesitó vernos a Chris, a Ethan y Leila, fue como una esponja, absorbió por completo el puro sentido de cómo estar con nosotros.

Así como tu generación creció viendo cine de vaqueros, ¿crees que pueda interesarle un género como el western a la generación más joven?
Supongo que la historia, la idea del comentario social tan humano, es relevante para todas las generaciones. Es lo único que puede atraerles a todos. Se trata de las elecciones que tomamos en la vida y en lo que quieres convertirte con tus propias decisiones, tratando de darte cuenta si no haces algo solo por cierta influencia externa. Es algo que puede tratarse en cualquier género y me parece interesante. Al menos es la clase de historia que a mí me gustaba cuando era joven y que me sigue interesando. El cine tiene mucha influencia en todos nosotros, y a todas las edades.

¿Qué tan difícil resultó balancear la agenda del trabajo como director de cine en contraste con el rol de actor en la serie “Daredevil” de Marvel?
Solo tuve que agregarlo al calendario. Cuando quieres hacer algo, no importa lo que sea, vas a encontrar la forma de hacerlo. A la hora de dirigir dediqué el 100% de mi tiempo al cine. Para la post producción tuve a Katherine McQuerrey, que también edita las producciones de los hermanos Cohen. Con ella trabajamos en el estudio de edición al mismo tiempo que yo filmaba la serie de Marvel cuando tenía tiempo.

Obviamente ya sabemos que Netflix y Marvel terminaron definitivamente con la serie de “Daredevil”, pero ¿hablaron al menos sobre la posibilidad de revivir en cine la historia de Kingpin?
No lo sé. Tengo el presentimiento de que voy a ser el último en enterarme. Siempre es así. No sabemos lo que va a pasar. Cuando cancelaron la serie fue una sorpresa total y todavía más cuando supimos que cancelaron “The Punisher” y “Jessica Jones” también.

¿Y qué podemos saber sobre “Ratched”, la otra nueva serie de Netflix que vas a filmar en base al clásico del cine “One Flew Over The Cuckoo’s Nest”?
La estamos filmando, pero no me permiten decir nada. Voy a interpretar el rol del gobernador de California en 1947. Es todo lo que puedo decir. Va a ser increíble.

¿Qué lado de Vincent D’Onofrio vamos a ver más a partir de ahora? ¿El actor o el director? Tengo otra idea para filmar.
Incluso estamos buscando un guionista. Probablemente sea una mujer, una mujer mexicana seguramente. La estoy buscando ahora. Esa es mi nueva dirección.