Estas son las razones por las que no deberías comer de pie

Es una rutina que tienen muchas personas, pero que no es aconsejable para el organismo

Comer de pie incide negativamente en la digestión. (Shuttesrtock)

Mucha gente tiene por costumbre comer de pie y se debe a muchas razones. Es un hábito que particularmente tiene la gente que trabaja preparando comidas, como pueden ser los cocineros o ayudantes de un restaurante. Pero no es exclusivo de esta profesión, ya que muchos profesionales lo hacen a la par del resto de sus tareas laborales. Y lo cierto es que no es saludable.

Comer de pie hace que, de manera inconsciente, mastiques más de prisa y en menos cantidad que cuando te tomas el tiempo de sentarte a comer. Y esto incide notoria y negativamente en la digestión.

Al comer de pie, no relajamos nuestros músculos y toda esa tensión repercute en el estómago, por lo que puede derivar en dolores al terminar de comer. Al estar de pie, el bombeo de sangre es mayor hacia la zona de nuestras piernas y no es el adecuado en los músculos que intervienen en la digestión. Además, al comer de pie, posiblemente la elección de comida no sea la más saludable y se parezca más a las comidas rápidas, que también son las más calóricas.

Además, el hecho de comer más deprisa y masticar más rápido hace que traguemos más aire, que el estómago se llene más rápido y tengamos una falsa sensación de saciedad que desaparece igual de rápido, por lo que pronto volvemos a tener hambre.

Como siempre, lo más recomendable es comer sentados, en un ambiente lo más relajado posible, sin mezclarlo con nuestras tareas o rutinas de trabajo. Además, es un momento que involucra aromas, sabores, texturas, por lo que también debería ser un momento que nos permitamos disfrutar, ¿no te parece?