No los peles: estos alimentos es preferible comerlos con sus cáscaras

Es una costumbre habitual el pelar las frutas y las verduras, ¿no es cierto? Pero no deberías hacerlo con todos los alimentos. Específicamente en algunos casos, la piel tiene un sinfín de beneficios que quizás no conoces y por eso deberías comerlos de todas maneras.

De todas formas, para comerlos con su piel es importante estar atentos a la higiene. Debes lavarlos bien, retirar las partes que veas feas o dañadas.

La piel de la papa

Contiene vitamina C, carotenoides, flavonoides y ácido cafeico, que luchan contra los radicales libres. Es cierto que gran parte de esta propiedad se pierde en la cocción, pero de todas maneras está presente. También tiene hierro, ácilo alfa-linolénico, que pertenece a la familia omega-3 y fibra que enriquece la microbiota intestinal. También tiene potasio, que previene calambres y regula la tensión arterial.

De todas formas, si ves partes de coloración verdosa si debes quitarlas. En este caso, se trata de una sustancia tóxica que la papa produce para su defensa. Debes quitarla, porque su efecto no se quitará ni siquiera en la cocción.

La piel del tomate tiene altos contenidos de licopeno, que es un químico con un gran poder antioxidante. De estos, también tiene quercetina, que además es antiinflamatoria y anticancerígena. Además, es rica en vitamina C. Lo ideal es que los comas, crudos o cocidos, con su piel.

Zanahoria

La piel de la zanahoria absorbe todos los nutrientes y los que transforma en azúcares, los disminuye en la cocción. Tiene carotenos como la pro-vitamina A, que es un pigmento natural que le da su color y que el cuerpo transforma en vitamina A a medida que lo necesita. Es ideal comerla, sin pelar, rallada y cruda en ensaladas.