Yolanda Borrás, cómo educar con melodías e idiomas

Yolanda Borrás es una consultora, educadora musical y gestora cultural que fundó en 1999 la página web “I’m Bilingual!”, un programa bilingüe de artes integradas para niños de temprana edad en la ciudad de Nueva York. Recientemente lanzó su primer libro musical educativo para niños titulado “Los pajaritos” (The Little Birds), a la venta en DISESA, que contiene ilustraciones y actividades interactivas para niños pequeños. Asimismo, Borrás continúa participando en proyectos relacionados con la educación, la cultura y la música.

¿Por qué la música es tan efectiva como herramienta educativa? La música puede ser utilizada de manera efectiva en el aula, el hogar y el diario vivir. Es una gran herramienta cuando se aplica al aprendizaje de idiomas, en el manejo del aula, para crear un ambiente de bajo estrés, para agudizar el oído y aprender a escuchar. Si tomamos el ejemplo de cómo ayuda al aprendizaje de idiomas en el caso del libro “Los pajaritos”, el cual he utilizado exitosamente en mi programa de música en Nueva York, al presentar la canción ilustrada, el cerebro procesa una gran variedad de información simultáneamente. Los niños disfrutan de las imágenes a la vez que cantan la canción, creando así una asociación inmediata entre la imagen y la palabra. La memoria se fija al repetir la canción una y otra vez y la lectura se facilita ya que el ritmo crea una corriente continua para empujar gentilmente al niño hacia la lectura de la próxima palabra. Un libro de canción ilustrada, como es el caso de “Los pajaritos”, también contiene elementos paralingüísticos donde se asocian los movimientos, en este caso, de los animales con la canción.

¿El hecho de que los niños de esta generación tengan una mayor interacción con la tecnología facilita el trabajo de un educador o lo entorpece? Pienso que todo en la vida necesita moderación. La tecnología es una gran herramienta para el educador siempre y cuando se utilice estratégicamente. Invadir un aula con computadoras y tabletas no garantiza un éxito académico. Los educadores tienen el deber de elegir los programas adecuados, utilizarlos con discreción y como herramienta suplementaria, no como elemento primario en su currículo.

¿Proyectos como su libro y “I’m Bilingual!” pueden ser considerados puentes entre distintas culturas? Ese es mi deseo, y el currículo que he diseñado tiene como base ese principio. La mayoría de canciones y actividades del programa “I’m Bilingual!” forman parte de tradiciones y del folklore de países representados. En el caso de “Los pajaritos”, esta canción es popular en la República Dominicana, pero viene de España. En mis años de investigación encontré una versión original llamada “Los pececitos”, en un libro de poesía popular murciana. Estoy diseñando otro libro llamado “Chocolate”, una combinación de una rima de principios del siglo XX y otra de México. Además de ser una rima divertida donde los niños desarrollan el pulso interno, con este libro se puede explorar el descubrimiento del cacao en México por colonizadores españoles hasta su conversión en la bebida de altas clases sociales de Europa.

¿Cómo involucran a los padres en el proceso de aprendizaje? El padre o adulto que acompaña al niño a las clases es una figura muy importante en su aprendizaje. Un adulto comprometido a participar en las actividades del niño tendrá mucho éxito. Las clases para niños de edad temprana exhortan a los padres y adultos a participar ya que el niño ve al adulto como su modelo. El niño analiza que si las actividades son importantes para su mamá o papá, entonces también debe participar. En la casa igual, los padres que separan diariamente un momento especial con sus niños desarrollarán mejor conexión con ellos a largo plazo.

¿Cómo influye el aprendizaje de un nuevo idioma en el desarrollo intelectual de un niño? El trabajo de investigación de los últimos veinte años ha sido crucial para el desarrollo y la defensa del niño bilingüe. El niño bilingüe procesa más información que el que habla un solo idioma. Inicialmente, se desarrolla más lentamente, pero está comprobado que los niños bilingües no sólo alcanzan a sus compañeros al llegar al tercer o cuarto grado, sino que de ahí en adelante los sobrepasan intelectualmente. La parte de la función ejecutiva del cerebro se desarrolla mucho más en un niño bilingüe que en un monolingüe. Cuando se habla más de una lengua, el cerebro tiene que suprimir la información en el primer idioma para conversar en el segundo, o en el tercero. Esta destreza de cambiar el switch contribuye en otros aspectos de la escolaridad. El estudiante puede desentonarse con más facilidad de algo que causa distracción para enfocarse en la presente actividad. El niño multilingüe también es más creativo, al darse cuenta a temprana edad que un elemento puede estar representado de múltiples formas. Y, finalmente, el niño multilingüe se convierte por extensión en un ser multicultural, abierto a otras culturas y al mundo a edad temprana.

¿Tienes una idea de qué tema o canciones quieres trabajar en el próximo libro o CD?

Sí, hay canciones divertidas como “Pimpón”, “La Pájara Pinta”, “A la rueda, rueda”, “La Finca”, “Chocolate”, “La Caraqueña”, “El tren” y otras.

Fotos: fuente externa.