Hablar de moda es hablar de industria
SANTO DOMINGO. En años recientes la industria de la moda ha pasado de ser vista como un ejercicio en vanidades, a ser reconocida como una industria global que genera aproximadamente USD $1.2 billones anualmente, y emplea a más de 4 millones de personas. En República Dominicana esta industria está en crecimiento, y gracias a los esfuerzos de eventos como Dominicana Moda se ha dado un gran auge en lo que respecta al diseño dominicano. Sin embargo, la industria de la moda no depende solamente de diseño, sino también del área textil. En el país el Grupo M, junto a Codevi, su planta gemela, son el modelo a seguir en este ámbito de la industria en República Dominicana.
Fundado en Santiago en el 1986, el Grupo M emplea alrededor de 3,500 dominicanos, y se enfoca en la primera parte del proceso de manufactura. Esto implica órdenes de producción directas del cliente, recreación de especificaciones, montaje de muestras, y pendiente la aprobación del cliente, el tratamiento de telas y cortado de patrones para ensamblaje. La localidad en Santiago también abarca otros aspectos de la industria, como el diseño y el merchandising.
La mayoría de los diseñadores son entrenados por el Grupo M, con un enfoque orientado más bien al diseño técnico y para producción en cantidades industriales. Dentro del ámbito del merchandising están incluidas propuestas de tendencias para clientes del Grupo M, entre ellos Nordstrom, Macy’s, y Levi’s. Las propuestas no están dirigidas de manera específica, pero son adaptables al estilo y necesidades de cada cliente. Estas propuestas son realizadas cada temporada--primavera/verano y otoño/invierno --dos veces al año, y conllevan predicciones de tendencias, las cuales son hechas en conjunto con una firma especializada desde Nueva York.
El diseño de patrones, junto al área de planificación, son el inicio de cada proceso. Cada diseño, ya sea en base a especificaciones o bocetos del cliente, es único y archivado desde que llega a la compañía. De ahí se pasa a hacer muestras de los diseños, las cuales son manejadas por técnicos en sus diversas áreas (jeans, tejidos, o knits). Este proceso incluye el tratamiento de tela, el color deseado y si el diseño lo requiere, cualquier tratamiento ya sea de estampado, envejecimiento, etc. Alrededor de 250 muestras son producidas semanalmente, ya que son hechas mayormente a mano y auditadas para ver la calidad y el estándar en cada paso de manufactura. Cuando las muestras son aprobadas por el cliente se pasa a producción en una de las 5 plantas dependiendo del producto, tomando como guía la muestra aprobada.
Cabe destacar que el centro de toda corporación son sus empleados, y en el Grupo M su progreso y bienestar es una prioridad. La mayoría de los empleados en la localidad de Santiago son graduados de la universidad, desde Altos de Chavón hasta la UASD. A parte de sus estudios independientes, los empleados también son entrenados en sus áreas, dándoles mejor oportunidad para progresar dentro de la compañía. Muchos de los empleados que hoy en día tienen posiciones como gerentes o coordinadores empezaron como operarios, demostrando que el crecimiento dentro del Grupo M no es solo posible, si no preferible.
La segunda parte del proceso, incluyendo la costura de las piezas, el empaque, y el envío, se llevan a cabo en Codevi. Fundada en Ouanaminthe, Haití en el 2002, Codevi funciona como una zona franca textil. La parte administrativa está en República Dominicana, y la parte de manufactura en Haití. En Codevi se emplean alrededor de 7,400 personas, llevando el total de empleados a aproximadamente 11,000.
Los parámetros de empleo en Codevi son diferentes a los del Grupo M debido al tipo de labor. En Codevi el requerimiento mínimo es haber pasado el sexto de primaria, y saber leer y escribir; también se les da un exámen básico de matemáticas. Ya dentro de la compañía a los empleados se les anima a continuar sus estudios, y un buen porcentaje ha llegado al bachillerato.
En la localidad de Haití hay 7 plantas en funcionamiento continuo, con otras 2 en construcción. Al igual que en Santiago, las plantas están divididas de acuerdo a producción, ya sean jeans, ropa íntima, t-shirts, pantalones, etc. dentro de las plantas los empleados se dividen por cliente, y trabajan únicamente para ellos. En Haití hay un average de 1,200 empleados por planta, y en Santiago alrededor de 400-600 empleados por planta. La mayoría de los empleados son jóvenes, entre 18-30 años. Ya que Codevi se encarga solamente de producción, el volumen de manufactura semanal es de 135,000 pantalones, 30,000 docenas de ropa íntima, y 120,000 docenas de knits .
La apertura de Codevi no solo ha cambiado el estilo de vida de los habitantes de Ouanaminthe, si no que ha convertido al Grupo M en una compañía binacional. Esto ha sido un paso de gran importancia no solo estratégica, sino también para el crecimiento de ambas naciones. Bajo el concepto de valor agregado, algo que rige a ambas plantas, Grupo M y Codevi trabajan para mejorar la vida de sus empleados creando empleos sostenibles dentro de un buen ambiente. Proyectos como Tipa Tipa, una guardería dentro de Codevi para hijos de empleados, motiva a los empleados a esforzarse más sabiendo que sus hijos están en buenas manos. Tipa Tipa recibe niños desde los 45 días hasta los 6 años, por un aporte de $100 gourdes por semana. Además de la guardería, becas para hijos de empleados también incentivan el mejoramiento de las familias. Los proyectos de sostenibilidad ayudan a preservar el medioambiente no solo dentro del terreno de la compañía, si no también los ríos y demás terrenos cerca de Codevi. La siembra de árboles, limpieza de ríos, y el reciclaje son ejemplos de estos proyectos que tienen como objetivo mejorar el estilo de vida de la compañía y sus empleados.
Dada la importancia del Grupo M y Codevi en la industria textil del país, su participación este año en Dominicana Moda fue una fusión perfecta de diseño e industria . El Grupo M fue parte del pabellón donde también participaron la Asociación Dominicana de Zonas Francas, el Ministerio de Industria y Comercio, entre otros. El propósito de este pabellón fue atraer negocios e inversiones, no solamente una presentación. La meta es ayudar a la industria y manufactura local, convirtiéndolas en un negocio de exportación para ventas, no solo para otras compañías. La exposición que les da Dominicana Moda es solo el comienzo; el trabajo empieza después. La industrialización de la moda es un proceso relativamente nuevo en Latinoamérica, pero que ha dado grandes resultados en otros países como Colombia con ColombiaModa, inaugurada en el 2009.
A la industria de la moda le queda mucho por recorrer, y es imprescindible que todas las instituciones, ya sean privadas o del gobierno, trabajen juntas para poder progresar y crecer.