Breve historia constitucional

Nacimos al mundo constitucional con un texto, el del 6 de noviembre de 1844, muy liberal, pero como no le gustó al caudillo de turno, hubo que agregarle unos “transitorios” que la volvieron letra muerta.

Duró casi diez años, y los liberales volvieron a la carga e hicieron otra igual que duró menos de un año porque el mismo caudillo mandó a hacer una a su medida que fue del agrado de todos los dictadores de entonces.

Cuatro años después, los cibaeños hicieron una muy liberal en Moca que también duró meses y volvieron a repetir la historia luego de la Restauración de la Independencia que tampoco duró nada.

Luego, la Constitución se modificó en 1866, en 1872, en el 1874, 1875, 1876, 1877, 1878, 1879, 1880 y 1881, que duraría hasta el 1887, cuando Lilís la acomoda para su dictadura. No conforme, el mismo Lilís la modificó en 1896 para reelegirse, reforma que duró 11 años, porque estábamos tan entretenidos con pleitos entre gallos que la Constitución no molestaba.

Luego tuvimos las dos de Mon Cáceres, en el 1907 y 1908 y las cuatro de Horacio, en 1924, 1927 y las dos del 1929. Luego Trujillo la acomodó 6 veces en 31 años.

En la transición postrujillista tuvimos dos, hasta la de 1963, muy buena, que también duró meses.

Luego Balaguer impulsó la de 1966, la de más larga vigencia porque tenía la reelección indefinida, hasta que la reelección creó la crisis de 1994 cuya reforma la prohibió y en el 2002, Hipólito la cambió para seguir en el palo y así llegamos a la del 2010, muy buena, pero que hubo que acomodar en el 2015 para la reelección.

Ya ven cuál es el problema...