Seis senadores

A Reinaldo Pared Pérez se le ha sublevado la tropa. Seis senadores de su partido se marcharon para no votar la consigna sobre las primarias abiertas. Como secretario general del PLD y presidente del Senado debe controlar el escenario, pero ya se ha roto públicamente la foto de familia: Leonel quiere primarias cerradas y Danilo lleva camino de imponerlas abiertas.

Es personal. Cada vez es más personal.

De rebote... todo el sistema político se afecta. Imponer primarias abiertas y simultáneas afectará enormemente a otros partidos. No tiene sentido y probablemente acabará el tema en el Constitucional.

Se puede controlar todo... pero no todo para siempre. Controlar desde el poder cómo los demás eligen a su candidato es ya una exageración. Puede haber normas que regulen con el objetivo de no permitir abusos internos etc... pero cada partido debería poder elegir a sus candidatos cuando y como decida. ¿Tiene que bailar todo el sistema electoral al ritmo de la pelea entre Danilo y Leonel?

La política, a veces, se sale del control de sus protagonistas. Se viven ciclos y llega el cambio por factores tan importantes como la economía mundial, el terrorismo o un desastre natural o tan anodinos como el aburrimiento que produce la repetición de los mismos errores.

Si algo transmitía el PLD era la disciplina interna, el orden, la cohesión. Frente a los sillazos voladores de su antigua competencia, el partido era un modelo de organización. Pero seis senadores acaban de plantarse.

¿Aprovechará la oposición la grieta? El PLD irá unido a las elecciones porque sabe que si no lo logra, perderá el poder. Romperse es un suicidio y ninguno de sus líderes piensa en que la derrota sea asimilable. La oposición debería marcar ahora la agenda. IAizpun@diariolibre.com