Aplauso

El proceso de tecnificación que se lleva a cabo en la Policía Nacional y, en general, en la lucha contra el crimen y en el servicio al ciudadano, debe recibir el aplauso de toda la ciudadanía consciente.

La inauguración, esta misma semana, del “Centro de Control del Crimen en Tiempo Real”, coloca a nuestra Policía a la altura de las entidades policiales más modernas.

Ese proceso de mejoramiento tecnológico debe ir acompañado de un cambio radical en la conducta y en la ética de la fuerza policial. Quizás se requiera un cambio paulatino del personal, pero para que el cambio sea efectivo, la Policía requiere ser mejor pagada y reconocida en sus esfuerzos en favor de la ciudadanía.

Cada país tiene la policía que paga y, aún así, la nuestra es una agencia del orden muy efectiva en la persecución del crimen.

Sus carencias tienen que ver con el personal que puede reclutar por los bajos salarios y por la falta de mejores controles éticos. Pero se está haciendo el esfuerzo.