Bien hecho presidente Luis Abinader

El presidente Luis Abinader tomó la decisión correcta al hacer un alto en su agenda de trabajo en San Pedro de Macorís y visitar la familia de los niños arrollados por un conductor irresponsable en esa ciudad.

Allí, Abinader se comprometió con la familia de los tres niños, dos de los cuales fallecieron, y sostuvo que “vinimos aquí para brindarles todo el apoyo moral y decirles que hemos dado instrucciones de que una unidad especial haga las investigaciones, que van muy avanzadas”.

Frente a los familiares, Abinader comprometió a la jefatura de la Policía Nacional, así como al Ministerio Público, para que no dejen impune un crimen de semejante porte.

La decisión de Abinader, repetimos, es ejemplar, pero nuestra observación a las autoridades policiales es que da grima que tenga que el propio presidente del país ser el garante de calma para una familia que pide justicia, cuando hay todo un aparato gubernamental encargado de esa tarea.

La desconfianza del pueblo en las instituciones del orden es mayúscula y poco se ha avanzado en ese sentido en esta nueva administración. Hay que ponerle el acelerador a la reforma policial y devolver la confianza en ese organismo.