Acuerdos institucionales, ¿para qué?

Es más el figureo que los logros reales...

El lego piensa que gobierno es gobierno y que las dependencias oficiales debieran trabajar como equipo y prestarse la colaboración debida. Así el resultado sería mejor y obra de todos.

Ese mundo ideal sin embargo no existe, y se tiene la impresión de que cada cual anda manga por hombro, o por lo menos que las agencias se libran solas, sin importar lo que hagan las demás.

Surge la pregunta, ¿de qué sirven o cómo aprovechan los acuerdos que se firman entre titulares de entidades públicas para asistirse mutuamente? El rito parece importante, pues a todos seduce y ningún funcionario, y mucho menos si es nuevo, se resiste a ese figureo de alzada.

Tal vez nunca se sepa nada o más del flirteo interinstitucional, pero la foto de prensa será un logro, pues va a álbum, seguro, y quién sabe si a galería.

¿Cómo esperar que el Gobierno rinda, o sus departamentos, si los responsables se la pasan como la reina mala, delante de un espejo y preguntándose si son más bonitos que Blancanieves?

Eso comenta el enanito más enanito y que se la da de chismoso.